Foro Abierto: Brasil; Bolsonaro señalado como racista

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha vuelto a avivar las críticas en su contra tras considerar que los pueblos originarios de su país están evolucionando y convirtiéndose cada vez más en seres humanos.

La Asociación de Pueblos Indígenas de Brasil (APIB) ha decidido demandar al mandatario por racismo, al tiempo que insiste en que la justicia debería detener a quien califican de hombre perverso.

Mientras tanto, la Fiscalía de Brasil ha presentado cargos contra el periodista estadounidense Glenn Greenwald por haber incurrido en un presunto delito cibernético e incitar a llevar a cabo ‘hackeos’ para pinchar teléfonos y filtrar información de altos cargos y autoridades del país.

El portal de noticias The Intercept, cofundado por Greenwald, publicó en 2019 una serie de conversaciones que el ministro de Justicia, Sergio Moro, habría tenido con fiscales e investigadores cuando era juez del caso 'Lavo Jato' con el objetivo de inculpar al exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva.

Alexandre Fuccille, sociólogo y profesor de la Universidad Estatal de Sao Paulo, subraya que los indígenas lo que quieren es que se les respete, con independencia del modelo productivo por el que apueste el país. Considera que la actual actuación de Bolsonaro corresponde con lo que prometió en campaña cuando hablaba con desprecio de los pueblos originarios. Con relación al caso de Greenwald, recuerda que - según la constitución brasileña - la fuente periodística está resguardada y protegida, así que ve un intento evidente de silenciar la verdad.

Francisco Trejo, doctor en Periodismo, dice que el problema de Bolsonaro radica cuando habla en público, pero que en realidad apoya que los indígenas tengan los mismos derechos que el resto de la sociedad. En lo referido a las acusaciones del cofundador de The Intercept, remarca que no todo vale para obtener la información y que la única forma para que el periodista pueda librarse del cargo de hackeo es revelar su fuente, aunque sea de manera secreta.

Joao Compasso, director de la revista Bossa, valora que se hable de integración, pero debe hacerse garantizándoles los derechos y los territorios a los indígenas, quienes al parecer son un estorbo para los deseos económicos de Bolsonaro. En torno al caso Greenwald cree que como en cualquier Estado de derecho, si se comprueba delito debe responder ante la ley, pero cree que la Fiscalía está actuando como represalia al trabajo del periodista que desveló las actuaciones inadecuadas del juez Moro.

Javier Arias-Borque, periodista, inicialmente pensó que se trataba de un error casual de Bolsonaro cuando escuchó sus declaraciones, pero la ausencia de rectificaciones da muestra de que sus comentarios sobre los indígenas son el punto de vista real del presidente. De todos modos, se pregunta si el 1 % de la población, que son los nativos, puede decidir sobre el 99 % restante en cuanto al uso de la tierra especialmente cuando la Constitución de Brasil reconoce que se pueden hacer negocios en la Amazonia.

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