“Los informes de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) muestran que Irán ha cumplido todos sus compromisos (…) Hasta el momento, el cumplimiento de los compromisos por parte de EE.UU. no ha sido aceptable. EE.UU. debe cumplir con sus obligaciones”, ha dicho hoy miércoles el representante de Irán ante la AIEA, Reza Nayafi.
El funcionario persa ha realizado tales declaraciones tras la reunión de la junta directiva de la AIEA sobre el acuerdo nuclear entre Irán y el Grupo 5+1, conocido como Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés).
Hablando a la prensa, Nayafi ha recalcado que para que el pacto nuclear siga en vigor, todos los miembros del Sexteto (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) deben cumplir todos sus deberes al respecto.
Por otro lado, se ha referido a la venta de reservas de agua pesada de Irán y ha dicho que Teherán está realizando negociaciones al respecto con otros países en virtud del acuerdo nuclear (este determina que las reservas de Irán de agua pesada no deben superar las 130 toneladas, pudiendo Irán vender su excedente en el mercado internacional). Sin embargo, no ha especificado los países de destino ni los tiempos, por ser información “confidencial”.
En la reunión de la AIEA, la Unión Europea (UE) ha confirmado a través de un comunicado que Teherán ha cumplido los compromisos adquiridos con el acuerdo nuclear y, tras reiterar su apoyo al JCPOA, ha pedido cooperación a todas las partes.
Los informes de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) muestran que Irán ha cumplido todos sus compromisos (…) Hasta el momento, el cumplimiento de los compromisos por parte de EE.UU. no ha sido aceptable. EE.UU. debe cumplir con sus obligaciones”, dice el representante de Irán ante la AIEA, Reza Nayafi.
Según Teherán, EE.UU. ha saboteado directa o indirectamente la aplicación del pacto nuclear internacional, sellado en julio de 2015 e implementado desde enero de 2016.
Actualmente, la Administración de Washington trama imponer más sanciones contra el país persa so pretexto de bloquear el programa de misiles iraníes. Las autoridades persas ya han dejado bien claro que el programa de misiles es una capacidad de defensa propia irreversible y que el país persa nunca negociará ni modificará su política de defensa por amenazas de EE.UU.
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