Para el pueblo palestino de la Franja de Gaza, la sombra de la guerra genocida israelí opaca cualquier interés por conocer cuál será el ganador de los publicitados comicios.
¿Kamala Harris o Donald Trump? La pregunta que ocupa las portadas en todos los medios de prensa y es objeto de interés global. Sin embargo, tal interrogante carece de importancia para los palestinos de Gaza. Abrumados como están por más de un año de guerra genocida israelí, los gazatíes dudan que el resultado de las elecciones modifique la postura de Washington ante las prácticas de exterminio del régimen sionista.
Desde el comienzo de la guerra contra Gaza, Estados Unidos incrementó su apoyo político y militar al régimen israelí. Postura que convierte a Washington en cómplice directo del genocidio, y sigue a décadas de apoyo incondicional al ente de ocupación.
Cada declaración formulada por funcionarios estadounidenses para expresar preocupación por los civiles palestinos queda en solo palabras huecas. La realidad demuestra que el bienestar de los palestinos es el menor de los intereses de Washington.
¿Kamala Harris o Donald Trump? La pregunta seguirá en el aire, quizás por varios días. Mientras tanto, bombas estadounidenses seguirán cayendo sobre los palestinos, manchando de sangre los muros de la Casa Blanca.
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