Al menos 20 mujeres y un niño han muerto este domingo como consecuencia de un nuevo ataque aéreo lanzado por Arabia Saudí y sus aliados en la aldea de Talan, en la provincia de Hajjah (noroeste de Yemen).
En reacción, varios partidos políticos yemeníes han difundido la misma jornada un comunicado en el que han arremetido contra el silencio de las Naciones Unidas ante tales crímenes que comete el régimen de los Al Saud contra los civiles yemeníes.
El silencio de la comunicad internacional, agrega la nota, supone dar la luz verde a Riad para que continúe sus bombardeos contra el país más pobre del mundo árabe, derramando así la sangre de los yemeníes inocentes, según recoge la cadena local de televisión Al Masirah.
Ante esta situación, los partidos yemeníes han hecho un llamamiento a la ONU, al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) y a la comunidad internacional para que cumplan con su responsabilidad moral y humanitaria y condenen la brutal agresión saudí y sus continuos crímenes contra los yemeníes.
Además, han pedido a todas las organizaciones internacionales y humanitarias de derechos humanos que apoyen al pueblo yemení, y han exigido el fin del bloqueo aéreo, terrestre y marítimo contra Yemen.
Dentro de dos semanas, se cumplen ya cuatro años de la campaña militar que lanzó Arabia Saudí y sus aliados contra Yemen, contando con el apoyo de EE.UU., con miras a restaurar en el poder al fugitivo expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, un estrecho aliado de Riad que apoya la intervención militar en su país.
El jueves, un equipo de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) reveló que la agresión militar saudí a Yemen provocó en 2018 que casi 100 personas murieran o resultaran heridas cada semana. La mayor parte de estas cifras se reportó en la costa oeste de Yemen, que abarca la provincia de Al-Hudayda.
fmk/rha/krd/alg
