“Más de 473 millones de niños, más de uno de cada seis a nivel mundial, viven hoy en día en las zonas afectadas por conflictos [armados], y el mundo experimenta el mayor número de conflictos [simultáneos] desde la Segunda Guerra Mundial”, según un análisis del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) de los datos disponibles y las tendencias mundiales vigentes publicado en el sitio web de la organización el sábado.
Según el informe de esta organización internacional, “el porcentaje de niños del mundo que viven en las zonas de conflicto se ha duplicado, de alrededor de un 10 por ciento en la década de 1990 a casi el 19 por ciento en la actualidad”.
A fines de 2023, 47,2 millones de niños y adolescentes habían sido desplazados debido a conflictos y violencia, y las tendencias en 2024 indican desplazamientos adicionales debido a la intensificación de los conflictos, incluso en Haití, el Líbano, Myanmar, el Estado de Palestina y Sudán, indica la Unicef.
Refiriéndose a los 33 000 actos de violencia registrados contra los niños en 2023, publicó: Esta cifra es la más alta en la historia de Unicef, y es probable que aumente en 2024, dada la guerra en curso en Gaza y Ucrania.
“Según casi todos los parámetros, 2024 ha sido uno de los más nefastos registrados para los niños en situaciones de conflicto en la historia de Unicef, tanto en términos de número de niños afectados como del nivel de impacto en sus vidas”, dijo la Directora Ejecutiva de Unicef, Catherine Russell.
Según Russell, un niño que crece en una zona de conflicto tiene muchas más probabilidades de no ir a la escuela, estar desnutrido o verse obligado a abandonar su hogar –con demasiada frecuencia de forma reiterada– que un niño que vive en lugares de paz.
Algunos medios de comunicación señalaron el martirio de más de 17 000 niños durante los [aproximadamente] 15 meses de la agresión genocida del régimen sionista en Gaza.
La cadena Al Jazeera citó a Rosalía Bolen, una especialista de Unicef, diciendo que el 96 por ciento de las mujeres y los niños en Gaza no pueden satisfacer sus necesidades alimentarias vitales, y los niños padecen enfermedades y carecen de ropa de invierno.
2024 se ha convertido en el año más mortífero registrado para el personal humanitario también, con la muerte registrada de 281 trabajadores humanitarios en todo el mundo, superando los récords anteriores [y como bien lo sabemos, de esta cifra la mayoría se corresponden a la Franja de Gaza debido a la atrocidad sionista].
Unicef hace un llamamiento a todas las partes en conflicto, y a quienes tienen influencia sobre ellas, para que adopten medidas decisivas para poner fin al sufrimiento de los niños, garantizar el respeto de sus derechos y cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario.
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