Situado en la orilla del río Éufrates, en el municipio de Al-Mayadeen, al sureste de la provincia de Deir Ezzor, la edificación posee un alto valor patrimonial, cuya construcción se remonta al siglo IX.
“La agresión viola todas las normas y convenciones internacionales que exigen la protección y el respeto de los bienes culturales, de conformidad con el artículo 4 de la Convención de La Haya de 1954”, ha explicado el Ministerio en un comunicado.
A su vez, el director general de Antigüedades y Museos, Nazir Al-Awad, ha revelado que el castillo de 1200 años sufrió grietas y fisuras en los muros y agregado que se está evaluando la magnitud de los daños.
En reiteradas ocasiones, las autoridades de Siria han denunciado los daños ocasionados al patrimonio histórico y cultural de la nación por las tropas estadounidenses acantonadas de forma ilegal en el país.
El pasado año, fuerzas de Estados Unidos intensificaron el robo de antigüedades sirias de sitios arqueológicos en Al-Hasaka y Al-Raqa, con el fin de sacarlas de contrabando con destino a lugares desconocidos, según un informe de la agencia estatal de noticias, SANA.
También señalaron que las tropas de ocupación estadounidenses y sus milicias aliadas se apoderaron de sitios arqueológicos considerados entre los más importantes del mundo, como Tel Baidar, Al-Hamma, Life Stone, Tel Mozan y varias colinas en el este de Al-Qamishli.
En la noche del viernes, el Ejército estadounidense bombardeó 85 objetivos en Siria e Irak, en respuesta al reciente ataque contra una base estadounidense en Jordania, que dejó un saldo de tres soldados estadounidenses muertos.
Damasco condenó enérgicamente la agresión de Estados Unidos contra su territorio, y consideró que se suma a una serie de violaciones a la soberanía nacional y la integridad territorial del país árabe, al tiempo que exacerba peligrosamente las tensiones en Asia Occidental.
Según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados de Siria, el nuevo ataque pone de manifiesto nuevamente que Washington es la principal fuente de inestabilidad global.
“Las fuerzas del Pentágono amenazan la paz y la seguridad internacionales mediante ataques a países y sus poblaciones, y socavan su soberanía”, indicó la Cancillería en su comunicado.
Puntualizó que no es sorprendente que esta agresión haya tenido como objetivo la región oriental del país, donde el Ejército sirio lucha contra los remanentes del grupo terrorista Daesh, mientras que Estados Unidos trabaja para revitalizar sus actividades terroristas, denunció.
La declaración expresó la profunda preocupación por el estado de parálisis que sufre el Consejo de Seguridad de la ONU debido a la obstrucción de Estados Unidos, al impedir su capacidad para asumir sus responsabilidades en detener estas graves violaciones de los principios de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional.
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