En un comunicado emitido este lunes, el portavoz del Comando Central de Estados Unidos (Centcom) afirma que aviones norteamericanos arrojaron municiones en las zonas norteñas de Siria, como parte de una nueva estrategia de Washington que no incluye el entrenamiento directo de los "rebeldes moderados".
Como resultado de esta exitosa operación, varios grupos árabes sirios cuyos responsables fueron verificados recibieron municiones”, afirma Patrick Ryder, portavoz del Comando Central de Estados Unidos (Centcom).
“Como resultado de esta exitosa operación, varios grupos árabes sirios cuyos responsables fueron verificados recibieron municiones”, ha afirmado el coronel Patrick Ryder, vocero de Centcom, en su nota citada por la cadena estadounidense Fox News.
Asimismo, un responsable del Departamento de Defensa de EE.UU., en calidad de anonimato, al brindar detalles de esa operación, ha dicho que aviones militares modelo C-17, escoltados por un caza, lanzaron en paracaídas las municiones, entre ellas granadas de mano, en la provincia de Al-Hasaka (noroeste).
Por otra parte, elementos de filas rebeldes han asegurado que las autoridades estadounidenses les han garantizado el envío inminente de armas, incluidos equipos de un nivel superior, para lanzar una ofensiva en Al-Raqa, provincia norteña de Siria.
El pasado viernes, el Pentágono anunció el cierre del proyecto de entrenamiento a los "rebeldes moderados". Empero, el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, aseguró que Washington continuará equipándolos.
Estados Unidos y Turquía han recibido críticas por un acuerdo alcanzado en febrero para entrenar y equipar en suelo turco a miembros de la llamada “oposición moderada” del Gobierno de Damasco, término con el que estos países justifican su apoyo a estos terroristas.
En tanto, el presidente de EE.UU., Barack Obama, reconoció el domingo que, desde el principio, ha tenido dudas sobre la eficacia del plan para entrenar a los grupos armados en Siria, considerados “moderados” en la lucha contra el EIIL (Daesh, en árabe).
Damasco, desde el principio de la crisis que vive Siria (marzo de 2011), ha acusado a algunos países como EE.UU., Arabia Saudí y Turquía de apoyar a los grupos armados y terroristas que actúan en su contra y que han provocado una verdadera catástrofe humanitaria en el país árabe.
La crisis en Siria se ha cobrado la vida de más de 240.000 personas, de acuerdo con la información proporcionada por el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
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