Este miércoles, cientos de personas han realizado una protesta en el área de Al-Hafayer, en los ocupados altos del Golán sirios, por segundo día consecutivo para defender sus tierras de cultivo del proyecto de aerogeneradores del régimen de Tel Aviv y se enfrentaron a las tropas israelíes.
Según la cadena libanesa Al Mayadeen, los soldados israelíes utilizaron desproporcionadamente balas de goma y botes de gas lacrimógeno contra los manifestantes desarmados para dispersar a la multitud que se oponían al plan de instalar turbinas eólicas en el territorio sirio ocupado.
La agencia estatal siria de noticias, SANA, informa que, como resultado, decenas de personas resultaron heridas; varios fueron catalogados en estado grave y crítico.
Las fuerzas israelíes también han detenido a más de 10 jóvenes manifestantes y han impedido que el personal médico y las ambulancias llegaran a los heridos durante las escaramuzas.
Tal y como anuncian las fuentes locales, el ejército israelí solicitó grandes refuerzos y cerró todos los caminos que conducen al área de Al-Hafayer.
Los videos compartidos el martes en las redes sociales mostraron a los residentes confrontando a las fuerzas israelíes y bloqueando las carreteras, quemando llantas.
اندلاع مواجهات بين أبناء #الجولان والقوات الإسرائيلية التي تمنعهم من دخول أراضيهم التي تعتزم السلطات الإسرائيلية إقامة مخطط التوربينات عليها
— Nour Abo Hasan (@nourabohsn) June 20, 2023
القوات الإسرائيلية تتطلق على أهالي الجولان وتطلق قنابل الغاز المسيل للدموع مما أدى إلى إصابات عديدة بينهم pic.twitter.com/Ld0isrkPcV
A su vez, el Ministerio sirio de Asuntos Exteriores y Expatriados saludó el martes mediante un comunicado la inquebrantable resistencia de los sirios en los ocupados altos del Golán.
“Sentimos orgullosos de su posición honorable y de su continua lucha por rechazar el proyecto de ocupación israelí destinado a robar cientos de hectáreas de tierras agrícolas del Golán árabe sirio ocupado bajo el pretexto de construir aerogeneradores”, se lee en el texto.
La nota también denunció los brutales ataques de las fuerzas de ocupación israelíes contra los golaneses y los consideró una continuación de las políticas agresivas y crímenes del régimen israelí que constituyen una violación flagrante del derecho internacional, los derechos humanos y las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas.
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