Esto ocurre en una movilización que plantea varias interrogantes sobre las intenciones de Ankara en el país árabe.
En un nuevo paso que refleja la existencia de planes turcos no pacíficos en el noroeste de Siria, los últimos informes indican que el Ejército envió un gran convoy militar que incluye, por primera vez, armas pesadas, como lanzamisiles y tanques. La caravana se dirigió hacia los puntos militares desplegados en el sur de Idlib.
Esta peligrosa escalada se une a la serie de violaciones turcas a la soberanía siria que no se han detenido desde el 5 de marzo pasado, ya que el número de vehículos militares que cruzaron la frontera hacia Idlib superó los 2800, además de más de 10 000 soldados, una seria indicación de una escalada en la zona desmilitarizada.
En el mismo contexto, Turquía ha fracasado por quinta vez consecutiva en el poatrullaje conjunto con Rusia en la autopista entre Alepo-Latakia, conocida como M4, con base en el acuerdo de Moscú, debido a las amenazas de las agrupaciones terroristas que rechazan tal entendimiento.
La nueva escalada turca en el noroeste de Siria es un indicador grave sobre la existencia de intenciones ocultas de Ankara, contradictorias a sus compromisos sobre la paz en ese país.
Bashar Barazi, Damasco.
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