“Estamos listos para defender el INF (siglas en inglés del Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio Washington-Moscú)”, ha dicho este miércoles Lavrov en su rueda de prensa llamando a los países europeos “a obligar a Washington a que tenga una posición más responsable” al respecto.
El ministro ruso ha señalado que los estadounidenses ignoran todas las propuestas “constructivas” de Moscú para salvar el tratado e insisten en su ultimátum, tal y “como se vio en la reunión en Ginebra (Suiza)” entre delegaciones de ambos países.
El martes, las delegaciones de Rusia y de EE.UU. se reunieron en Ginebra para hablar sobre el tratado INF, pero no lograron llegar a un acuerdo. Lavrov ha afirmado que pese a los esfuerzos de su país para salvar el INF, el Kremlin teme que Washington quiera “terminar” con ese acuerdo nuclear.
El jefe de la Diplomacia rusa ha calificado la situación mundial actual de “complicada”, señalando que el potencial de conflicto ha aumentado principalmente a causa de una “falta de voluntad de algunos países occidentales encabezados por EE.UU.”
Estamos listos para defender el INF (siglas en inglés del Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio Washington-Moscú)”, ha dicho el canciller de Rusia, Serguéi Lavrov.
El INF se suscribió en 1987 por EE.UU. y la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), y es de vital importancia para preservar la seguridad mundial.
EE.UU. acusa a Rusia de violar el Tratado INF al “desarrollar en secreto” las armas que en el convenio se prohíben, y utiliza dicho pretexto para su posible salida del convenio.
Moscú, por su parte, niega tajantemente estas acusaciones y denuncia que es Washington el que incumple el acuerdo al desplegar escudos antimisiles cerca de sus fronteras occidentales.
Aparte de la decisión de abandonar el Tratado INF, EE.UU. se retiró en 2002 del Tratado de Misiles Antibalísticos (ABM, por sus siglas en inglés) y tampoco pretende debatir la prórroga del Tratado de Reducción de las Armas Estratégicas (START III, por sus siglas en inglés), ambos temas han suscitado gran preocupación en Rusia y otros países del mundo.
snz/ktg/alg/msf