“Expresamos nuestra profunda preocupación ante la decisión sobre la salida unilateral de EE.UU. del acuerdo nuclear, que no ayudará a fomentar la seguridad y la estabilidad de la región y del mundo entero”, se lee en un comunicado emitido este miércoles por la oficina del presidente iraquí, Fuad Masum.
El mandatario iraquí insta en la nota a su homólogo estadounidense, Donald Trump, a reconsiderar su decisión y activar esfuerzos diplomáticos encaminados al cumplimiento del acuerdo, para “poner fin a ese peligroso reto y evitar una posible catástrofe”.
Masum saluda, frente a la actitud de Washington, la voluntad del resto de países implicados en el JCPOA (siglas en inglés de Plan Integral de Acción Conjunta), entre ellos el propio Irán, por su disposición a seguir cumpliendo el pacto a pesar del desplante estadounidense.
Un segundo comunicado oficial iraquí, del Ministerio de Exteriores, señala la “profunda inquietud” de Bagdad por la “peligrosa” evolución de los acontecimientos, después del discurso pronunciado el martes por Trump, lleno de amenazas y acusaciones contra Irán, que a juicio del Gobierno de Irak puede tener consecuencias para toda la región.
El jefe de la Casa Blanca volvió ayer a imponer sus reglas a la agenda mundial, anunciando la salida unilateral de su país del pacto nuclear de 2015 logrado tras varios años de intensas pláticas por Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Expresamos nuestra profunda preocupación ante la decisión sobre la salida unilateral de EE.UU. del acuerdo nuclear, que no ayudará a fomentar la seguridad y la estabilidad de la región y del mundo entero”, se lee en un comunicado emitido por la oficina del presidente iraquí, Fuad Masum.
En su discurso, el magnate acusó a Irán de desestabilizar Oriente Medio, apoyar a grupos terroristas como Talibán y Al-Qaeda, y desarrollar misiles balísticos con capacidad nuclear.
La medida de Washington ha generado un aluvión de protestas entre el resto de las partes implicadas en el acuerdo y de la gran mayoría de la comunidad internacional. Irán, por su parte, ha repudiado la decisión de Washington y prometido seguir cumpliendo el pacto, siempre y cuando se garantice que sigue beneficiando sus intereses nacionales.
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