Fuentes citadas este domingo por el rotativo árabe Asharq Al-Awsat revelan que Estados Unidos está construyendo cinco bases militares en el norte de Irak y cerca de la frontera con Siria con el fin de contrarrestar a las fuerzas populares iraquíes (Al-Hashad Al-Shabi) e impedir su avance en la zona frente al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).
El sheij Mozahem al-Hovait, portavoz de las fuerzas árabes tribales de la provincia de Nínive (norte de Irak), asegura durante su entrevista con dicho medio que los estadounidenses ya están a punto de completar la construcción de una de sus bases y que sus otras bases militares están en las primeras fases de construcción.
“Las fuerzas estadounidenses empezaron hace semanas a construir su base militar más grande en la provincia de Nínive en la zona de Kahriz. Al mismo tiempo, se están construyendo otras cuatro bases en diferentes zonas de Nínive”, ha afirmado.
Las fuerzas estadounidenses empezaron hace semanas a construir su base militar más grande en la provincia de Nínive en la zona de Kahriz. Al mismo tiempo, se están construyendo otras cuatro bases en diferentes zonas de Nínive”, ha afirmado el sheij Mozahem al-Hovait, portavoz de las fuerzas árabes tribales de la provincia de Nínive.
Al-Hovait además ha confirmado que los soldados estadounidenses tienen como su objetivo principal tomar el control de las fronteras compartidas de Irak y Siria para de este modo impedir que las fuerzas populares iraquíes puedan tener contacto directo con las fuerzas sirias al otro lado de la frontera.
Otro de los principales objetivos de las fuerzas estadounidenses es impedir que se establezcan rutas de suministro y de transporte entre las Al-Hashad Al-Shabi y el Ejército sirio y sus aliados, por lo que las fuerzas estadounidenses se ocuparán personalmente de tomar el control de la frontera sirio-iraquí.
No obstante, opinan fuentes citadas por Asharq Al-Awsat, el principal motivo de la fuerte presencia de EE.UU. en las zonas fronterizas entre Siria e Irak es para impedir que Irán pueda continuar usando los puntos de contacto entre las Al-Hashad Al-Shabi y las fuerzas sirias para trasladar tropas y armamento a Siria, donde hay combatientes voluntarios iraníes que ejercen diferentes papeles como asesores militares.
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