En una sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre la situación en Asia Occidental, Al-Hakam Dandi, denunció la persistencia del organismo de celebrar reuniones mensuales sobre el “expediente químico sirio” a pesar de la falta de necesidad, y aseguró que esto tiene como objetivo de crear oportunidades para que “algunos países” repitan sus acusaciones contra el país levantino.
Explicó que las fuerzas del ocupante estadounidense suministraron a los terroristas en el área de Al-Tanf material químico para perpetrar un ataque de falsa bandera y acusar a Damasco del uso de armas químicas.
Siria confirma que las organizaciones terroristas y sus patrocinadores son quienes que fabricaron y siguen fabricando incidentes de uso de armas químicas con el fin de crear pretextos para atacar y chantajear a Damasco, concluyó el diplomático.
De vez en cuando, Estados Unidos y sus aliados acusan a Siria del uso de armas químicas contra su propio pueblo. Damasco rechaza dichos alegatos, y acusa a los países occidentales, bajo la tutela de EE.UU., de escenificar estos ataques para tensar la situación y justificar sus intervenciones militares en el país árabe.
Las acusaciones contra Damasco se producen, pese a que el país árabe entregó su arsenal de armas químicas en 2014 a una misión conjunta liderada por EE.UU. y la OPAQ, que supervisó la destrucción del armamento.
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