Transcurrido un año de su última visita, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, ha llegado este lunes a la capital siria, Damasco, en visita oficial.
El máximo diplomático persa sostuvo una reunión con el presidente sirio, Bashar al-Asad. Ambas partes abordaron los horizontes del proceso político, el Comité Constitucional sirio y el trayecto de Astaná, además del escenario actual en Idlib (noroeste de Siria).
Al-Asad manifestó sus condolencias a Irán y su pueblo por las víctimas que se ha cobrado el coronavirus, y criticó la injerencia política de algunos países, como EE.UU., en esta pandemia.
Las vías para hacer frente al terrorismo económico y las medidas unilaterales impuestas por EE.UU. a los pueblos de ambos países, han sido el eje principal de la reunión del canciller iraní con su homólogo sirio, Walid al-Moalem. Ambos diplomáticos destacaron la necesidad de intercambiar experiencias para consolidar la capacidad de sus países a la hora de contrarrestar el coronavirus y garantizar sus necesidades ante esta pandemia.
La visita de Zarif, según varios observadores, demuestra el incesante apoyo que ofrece la República Islámica de Irán a Siria, a todos los niveles, y es un indicativo de la alianza estratégica que une a los países del Eje de la Resistencia.
La visita de Zarif a Damasco se produce en uno de los momentos más críticos que atraviesa toda Asia Occidental, algo que requiere profundizar aún más en la coordinación entre ambos aliados para enfrentar los desafíos comunes.
Bashar Barazi, Damasco.
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