El Ministerio de Defensa de Rusia informó en un comunicado que durante los ejercicios que se llevaron a cabo el viernes, unos 6 buques de guerra, 7 aviones y 400 efectivos de la Flotilla del Caspio de la Armada rusa practicaron ataques aéreos simulados en la parte central del Caspio, al norte de la península de Absheron, Azerbaiyán.
El informe detalla parte de una operación especial de los buques en los ejercicios: se trata del ataque a un dron enemigo que intentaba utilizar armas químicas.
“Los tripulantes de los buques, vestidos con trajes de protección radiológica, química y biológica, realizaron la descontaminación de las zonas afectadas (...) Todos los puestos de combate y de mando de los barcos fueron sellados. Después de eliminar la amenaza, los buques continuaron el cumplimiento de su misión”, precisó el Ministerio ruso.
De acuerdo con la información “los ejercicios involucran a cuatro portadores de misiles de crucero de largo alcance Kalibr-NK, conocidos por su empleo desde el mar Caspio contra objetivos terroristas en Siria, las corbetas Daguestán y Tatarstán, y las pequeñas corbetas Uglich y Veliki Ústiug”.
Las embarcaciones también practicaron fuego de artillería y lanzamientos de misiles contra objetivos aéreos y marítimos, y actuaron en coordinación con aviones de combate del Distrito Militar Sur.
Los ejercicios se realizan con el objetivo de monitorear y evaluar el nivel de entrenamiento de combate, preparación técnica y equipo militar de las formaciones y unidades militares de la Flotilla del Caspio, y “no representan ninguna amenaza para los estados que rodean el mar Caspio”.
Las Fuerzas Armadas rusas de vez en cuando llevan a cabo estas maniobras militares para garantizar la seguridad del país ante posibles amenazas enemigas, en concreto de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Moscú denuncia el aumento de tropas de la Alianza Atlántica y la presencia militar de EE.UU. cerca de sus fronteras.
mrz/mjs/nii/