Los medios iraquíes, citando a dos fuentes de seguridad, informaron el domingo que las muertes ocurrieron después de que el convoy de la Policía Federal fue atacado con un artefacto explosivo cerca de la aldea de Safra en el distrito de Riyadh, en el suroeste de Kirkuk.
“Las fuerzas de seguridad fueron atacadas durante su misión de patrulla con un artefacto explosivo muy potente, seguido de disparos, que resultó en la muerte de 12 miembros, incluido un oficial”, se lee en los informes.
Las fuentes anunciaron que el atentado también dejó gravemente heridos a otros dos policías y que fue llevado a cabo por el grupo terrorista Daesh. La banda ha asumido, a su vez, la autoría del ataque.
El portavoz del Ministerio de Exteriores de Irán, Naser Kanani, ha condenado el mencionado atentado terrorista expresando sus condolencias al Gobierno y al pueblo iraquíes, así como a las familias de las víctimas.
Informes anteriores habían puesto el número de muertes en el incidente mortal en nueve personas.
Según los medios locales, después de lo ocurrido, las fuerzas de seguridad iraquíes “lanzaron una amplia operación de peinado” para purgar la zona de los terroristas.
A finales de 2017, Irak proclamó el fin de la guerra contra Daesh. No obstante, los remanentes de este grupo takfirí siguen activos en el país a través de células durmientes que llevan a cabo ataques en el territorio iraquí, los cuales han ido en aumento en fechas recientes.
Ante tal situación, las fuerzas de Irak llevan a cabo operaciones antiterroristas en diferentes partes del país para acabar con los extremistas.
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