En este sentido, la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann, exigió este jueves la detención del expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022) tras conocerse los resultados de una investigación de la Policía Federal, que lo acusa de ser uno de los principales responsables de un plan para dar un golpe de Estado y mantenerse en el poder tras su derrota electoral en 2022.
Hoffmann, quien lidera el partido fundado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, manifestó en sus redes sociales que las acusaciones de la Policía Federal “abren el camino” para que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos. “Intentar cometer fraude electoral, asesinar autoridades e instaurar una dictadura. La prisión es lo que merecen”, declaró.
La denuncia de la Policía Federal incluye a 37 personas, entre ellas a Bolsonaro y varios altos oficiales militares, por cargos de “abolición violenta del Estado democrático de Derecho, golpe de Estado y asociación ilícita”.
El informe será ahora revisado por el fiscal general de Brasil, Paulo Gonet, quien decidirá si presenta cargos formales ante el Supremo Tribunal Federal (STF).
Además, en un giro inesperado, las autoridades brasileñas arrestaron esta semana a cuatro militares y un agente de la Policía Federal, acusados de conspirar para envenenar al presidente Lula y de planear asesinatos contra otras figuras clave, como el vicepresidente Geraldo Alckmin y el juez del Supremo Alexandre de Moraes, quien lidera la causa contra Bolsonaro.
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