Conforme ha anunciado la madrugada de este sábado el canal Saberin News en la red social Telegram, varios proyectiles han caído en uno de los cuarteles del Complejo Base Victoria.
Según el informe, el sistema antimisiles C-RAM, instalado por Estados Unidos para proteger sus instalaciones militares y diplomáticas en Bagdad, no logró interceptar los cohetes.
Por su parte, el canal de televisión saudí Al-Arabiya ha anunciado que al menos tres cohetes han impactado los barrios ubicados en los alrededores del Aeropuerto Internacional de Bagdad, al sureste de la capital iraquí, donde se encuentra la base militar estadounidense.
Tras el ataque, según fuentes locales, varios aviones de combate estadounidenses sobrevolaron durante varias horas Bagdad.
El ataque, cuyos detalles aún se desconocen, ha tenido lugar después de que un convoy de las fuerzas de Estados Unidos, compuesto por 18 contenedores, fuera el viernes blanco de una ofensiva en la ciudad de Al-Nasiriya, en el sureste de Irak.
Al menos tres personas resultaron heridas y cinco contenedores ardieron en llamas, destruidos debido al ataque, acaecido cerca de un campo petrolero en la carretera internacional de la ciudad de Suq al-Shuyuj, sita en la provincia iraquí de Dhi Qar (sur), según reportó Saberin News.
Los ataques contra objetivos estadounidenses en Irak se producen con frecuencia en momentos en que en el país árabe se elevan cada vez más las voces que exigen la salida de las tropas estadounidenses, a las que consideran fuerzas invasoras y ocupantes, además de ser responsables de muchos actos criminales en suelo iraquí.
Aunque Estados Unidos señala siempre su dedo acusador a Irán y a las fuerzas populares iraquíes por tales ataques, la República Islámica ha rechazado los infundios y advierte que los ataques son obras de Washington y su aliado israelí y tienen como meta justificar la presencia militar estadounidense en Irak.
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