“Hemos comenzado a introducir gas en varios miles de centrifugadoras avanzadas y las hemos puesto en funcionamiento como parte de los planes destinados al desarrollo del programa nuclear”, ha remarcado este miércoles el jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Mohamad Eslami, a los periodistas, al margen de una reunión semanal del gabinete.
Además, ha enfatizado que el programa nuclear pacífico del país es transparente y está bajo la supervisión de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
Asimismo, Eslami ha recalcado que “la República Islámica de Irán siempre ha demostrado que favorece la interacción, pero nunca retrocederá ante la fuerza, la presión y la conducta ilegal e ilícita de la otra parte”.
El jefe de la organización nuclear iraní ha advertido que cualquier acusación contra Teherán resultará contraproducente.
“El programa nuclear de Irán tiene objetivos absolutamente transparentes y pacíficos. Si ignoran los objetivos relacionados con el JCPOA y sus propias obligaciones, y presionan unilateralmente al país con excusas y acusaciones, recibirán una respuesta que les saldrá por la culata”, ha reiterado Eslami a los periodistas.
“Nuestros objetivos son claros y transparentes, tanto cuantitativos como cualitativos. Estamos avanzando en esta dirección y hemos obtenido beneficios cada vez mayores de los resultados esperados. Estos efectos también se sentirán en la vida de las personas”, ha agregado.
En el mismo contexto, el jefe nuclear iraní ha subrayado que “el programa nuclear de Irán está bajo la supervisión de la AIEA y de conformidad con el Acuerdo de Salvaguardias, así como con el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP)”.
En la misma línea, Eslami ha expresado que algunas de las acusaciones contra Irán datan de hace 20 años y fueron impulsadas por grupos y servicios antiraníes para presionar a la República Islámica, sin embargo, posteriormente se demostró que estas acusaciones no tenían fundamento y eran inventadas.
Los comentarios de Eslami se produjeron un día después de que el canciller iraní, Abás Araqchi, anunciara que Irán activará varios miles de sus centrifugadoras avanzadas de fabricación nacional en respuesta a la reciente resolución de la agencia nuclear de las Naciones Unidas respaldada por Occidente contra el país.
La AIEA aprobó el jueves pasado la resolución propuesta por la troika europea (Reino Unido, Francia y Alemania), además de EE.UU. contra el programa nuclear pacífico de Irán en la Junta de Gobernadores.
La resolución antiraní fue aprobada a pesar de que Irán había acordado, la semana pasada, limitar sus reservas de uranio enriquecido al 60 % para mostrar su disposición a cooperar con la AIEA. Teherán había advertido que respondería de manera proporcional en caso de que se aprobara dicha resolución.
Tras anunciar la instalación de nuevas centrifugadoras, Mohamad Eslami explicó que esta acción se lleva a cabo en el marco de los derechos y compromisos de Irán, tal como se establece en el Acuerdo de Salvaguardias Integral. Este paso está destinado a proteger los intereses nacionales del país y a promover el desarrollo de su programa nuclear pacífico.
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