Ya han pasado quince años desde los atentados del 11 de septiembre de 2001. La zona cero permaneció cerrada al público durante toda la mañana.
El acceso solo estaba autorizado a los familiares de las víctimas y las autoridades invitadas a la ceremonia oficial. En los alrededores se agolpaban los habituales turistas, vendedores de recuerdos del 11 de septiembre, agentes de venta de rutas turísticas, muchos policías, y debido a esta fecha tan señalada, estaban también presentes los llamados “truthers”, personas que participan en el movimiento que reclama la verdad sobre lo que sucedió aquel día.
Pero más allá de la política y del debate sobre lo que sucedió aquel día, esos hechos siguen siendo muy dolorosos para algunas personas.
José Manuel Rodríguez, Nueva York.
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