“Está claro que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN [la Organización del Tratado Atlántico Norte], que es ante todo una alianza militar, tendría serias repercusiones político-militares que exigirían una respuesta de nuestro país”, afirmó el viernes la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, a los periodistas.
Sus comentarios se producen luego de que ambos países nórdicos manifestaran su apoyo al Gobierno de Ucrania contra Rusia y fueran invitados a participar en la cumbre extraordinaria de la OTAN en calidad de observadores, ya que los dos vecinos nórdicos ahora no forman parte de la Alianza Atlántica.
Zajárova también ha considerado que Finlandia y Suecia no deberían fundamentar su propia seguridad en el daño a la seguridad de otros países.
En otro momento de sus declaraciones, la vocera rusa dijo que el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, visitará a Ginebra (Suiza) entre el 28 de febrero y el 1 de marzo para participar en una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre el desarme.
Está previsto que Lavrov se reúna con la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, entre otros funcionarios, y mantendrá una serie de reuniones bilaterales.
La tensión entre Rusia y Occidente, con Ucrania en medio, se intensificó en las últimas semanas luego de que los países occidentales aumentaron su presencia militar en la zona bajo pretexto de amenaza de una invasión rusa contra el territorio ucraniano.
Moscú rechazaba tales acusaciones, pero las tensiones aumentaron hasta tal punto que lanzó una “operación militar especial” para proteger el pueblo ruso, así como a los ciudadanos de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en la región del Donbás (este de Ucrania), cuyas autoridades habían solicitado a Rusia ayuda para repeler las agresiones del Gobierno ucraniano.
Todo esto surgió a raíz de la petición de Ucrania a la OTAN de acelerar el proceso de la adhesión de su país a fin de enviar una “señal real” a Rusia. El Gobierno ruso advirtió en aquel entonces a Ucrania que su ingreso al bloque militar agudizaría el conflicto entre los independentistas prorrusos y las fuerzas en el este de Ucrania, subrayando que esa afiliación debería basarse en la opinión del pueblo ucraniano.
nkh/rba