• Un misil balístico intercontinental ruso RS-28 ‘Sarmat’.
Publicada: jueves, 6 de mayo de 2021 8:47
Actualizada: jueves, 6 de mayo de 2021 10:15

Rusia realizará tres pruebas de lanzamiento del misil balístico intercontinental ‘Sarmat’, capaz de destruir Texas, sin que ningún sistema pueda interceptarlo.

“Se llevarán a cabo tres lanzamientos del misil balístico intercontinental [ICBM, por sus siglas en inglés] ‘Sarmat’ como parte de las pruebas de desarrollo de vuelo en 2021”, informaron el miércoles fuentes de la industria de Defensa rusa a la agencia estatal local de noticias TASS.

Las fuentes anónimas, cercanas al Ministerio de Defensa de Rusia, indicaron también que los tres lanzamientos se realizarían desde la base espacial de Plesetsk, en el noroeste de Rusia, y uno de esos misiles, también denominado ‘Satan 2’, probablemente se disparará a su alcance máximo.

Según una de las fuentes, el primer lanzamiento de estos misiles se llevará a cabo tentativamente en el tercer trimestre de 2021 y el primer regimiento de misil ruso ingresará al servicio a finales de 2022.

Al respecto, el diario británico The Daily Mail describió esta arma de 208 toneladas, como un arsenal modernizado de Rusia que “es capaz de destruir un área del tamaño del Reino Unido o Texas (EE.UU.)”.

 

Además, el portal ruso de aviación Avia.pro, citando a expertos anónimos, ha señalado este jueves que “ningún país del mundo es capaz de interceptar el misil Sarmat”. De hecho, han señalado, incluso si existieran tales armas, “sería mejor no hacerlo” ya que “la detonación de ojivas nucleares a una altitud de varias decenas de kilómetros conducirá a la destrucción de un área aún mayor y […] el enemigo recibirá un daño aún mayor”.

Rusia se está dedicando a modernizar sus equipos militares y a mejorar su capacidad ofensiva y defensiva, dada las tiranteces que mantiene con el Occidente por temas como la crisis de Ucrania, situación que han conducido a ambas partes al borde de la guerra.

Mientras tanto, se han aumentado los temores a una nueva carrera armamentista entre EE.UU. y Rusia, las dos potencias nucleares, después de la retirada en 2019 de Washington del Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés), que obligaba a las dos partes a eliminar todos los misiles, tanto nucleares como convencionales, que tuvieran un alcance de entre 500 y 1000 kilómetros —de corto alcance— y de entre 1000 y 5500 kilómetros —de medio alcance—.

nkh/fmk