El representante permanente de Irán ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra (Suiza), Ali Bahreini, fustigó el lunes a varios Estados miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU por emitir una declaración crítica con Irán sobre los disturbios que siguieron a la muerte de la joven iraní Mahsa Amini. La niña falleció el 16 de septiembre en un hospital en Teherán, días después de ser detenida por la Policía.
Dijo que desde el primer momento de la muerte de la joven, los responsables de más alto nivel del país ordenaron “una investigación minuciosa y urgente” sobre los detalles de este “trágico incidente”.
El diplomático aseguró que los resultados finales de las pesquisas pronto se darán a conocer con “total transparencia”, al tiempo que pidió a otros países que “se abstengan de emitir declaraciones apresuradas” al respecto.
Precisó que el Gobierno iraní respeta los derechos constitucionales de la gente a la libertad de expresión y de reunión, pero no acepta los actos de caos, ni las acciones que perturban la seguridad y la paz. “La incitación a la violencia, los discursos de odio, el desorden público y el terrorismo no son admisibles en ninguna sociedad”, subrayó.
Bahreini advirtió además que “el doble rasero y el enfoque selectivo [que aplican algunos países en materia de los derechos humanos], así como la difusión de información falsa y engañosa constituyen una de las amenazas graves para la promoción de los derechos humanos”.
El embajador persa ante la ONU sostuvo que la República Islámica acoge con beneplácito los esfuerzos honestos para defender los derechos de las mujeres, al tiempo que destacó que “Irán es uno de los mejores y más exitosos ejemplos de promoción de los derechos de las mujeres”.
Concluyó, reafirmando el compromiso de la República Islámica con seguir cumpliendo sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos y dijo que Teherán seguirá cooperando activamente con el Consejo de Derechos Humanos y la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos para promover los derechos humanos de su pueblo, especialmente mujeres y niñas.
Irán ha sido escenario de incidentes de violencia callejera después la muerte de Amini. Entretanto, medios de comunicación y ciertas voces extranjeras se han aprovechado de la situación para promover una campaña antiraní y dar golpes a Irán, con este fin, incitan al vandalismo en el país persa.
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