“Creo que la elección de ciertos países como Arabia Saudí (en el CDHNU), es la mejor prueba de que los mecanismos internacionales de derechos humanos sirven a los intereses políticos (de ciertos Estados)”, ha subrayado hoy domingo el vicecanciller iraní para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Seyed Abás Araqchi.
Sus comentarios se producen dos días después de que la monarquía saudí obtuviera los votos necesarios para formar parte del CDHNU, a pesar de las críticas de las organizaciones no gubernamentales de derechos humanos que han denunciado que "el cuerpo internacional ha sido dominado por regímenes opresivos que buscan desviar las críticas e impulsar sus propias agendas".
Creo que la elección de ciertos países como Arabia Saudí (en el CDHNU), es la mejor prueba de que los mecanismos internacionales de derechos humanos sirven a los intereses políticos (de ciertos Estados)”, ha subrayado el vicecanciller iraní para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Seyed Abás Araqchi.
“Tal vez, la única cosa que no importa son los criterios reales de los derechos humanos, y es por ello que un país como Arabia Saudí integra el CDHNU e impulsa resoluciones contra otro Estado como la democrática República Islámica de Irán”, ha lamentado Araqchi.
En su intervención en una ceremonia celebrada en Teherán (capital persa), para conmemorar el 71º aniversario de la formación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Araqchi ha pedido al organismo internacional adoptar medidas prácticas para hacer frente a los problemas globales, en particular las crisis mortales en el Oriente Medio, en lugar de proponer meras propuestas de paz.
"La ONU no ha respondido adecuadamente a los acontecimientos como la situación que se desarrolla en Siria y Yemen, y no ha ido más allá de las meras propuestas de paz", ha lamentado.
El funcionario ha advertido sobre el aumento de las actividades terroristas por grupos como EIIL (Daesh, en árabe), en la región, y asegura que la “ONU puede desempeñar un papel importante en el establecimiento de la paz y facilitar la entrega de ayuda al pueblo sirio”.
En otro momento de su discurso, Araqchi ha expresado su profundo pesar por la crítica situación humanitaria vivida en Yemen por estar sometido casi los últimos dos años a bombardeos saudíes, mientras ha llamado a la ONU a ayudar a detener las atrocidades de Riad contra el empobrecido pueblo yemení.
Yemen vive una crisis agravada, desde marzo de 2015, por los ataques de Arabia Saudí para restaurar en el poder al fugitivo expresidente Abdu Rabu Mansur Hadi —fiel aliado de Riad—, ataques que han acabado ya con la vida de más de 4000 civiles, según cifras recientes de la ONU, aunque los organismos nacionales estiman que la cifra es mucho mayor.
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