La enfermedad se limitaba mayormente a las regiones bajo el control de EIIL: Al-Raqa, Deir al-Zor y Hasaka. Pero por el conflicto armado que vive el país, el sector de la salud pública resultó devastado, los hospitales fueron destruidos por bombardeos y centenares de médicos fallecieron en la guerra contra los takfiríes.
Además, el hecho de que los terroristas del grupo terrorista takfirí EIIL (Daesh en árabe) no se preocupen por las condiciones sanitarias en los territorios bajo su dominio, provocó el brote de leishmaniasis (o leishmaniosis).
La enfermedad se extendió por Siria principalmente, pero también alcanzó Irak, El Líbano, Turquía y el sur de Europa”, comenta Waleed Al-Salem de la Escuela para las Enfermedades Tropicales de Liverpool.
Waleed Al-Salem, uno de los autores del estudio correspondiente, realizado por la Escuela para las Enfermedades Tropicales de Liverpool (noroeste del Reino Unido), comentó en la entrevista para Daily Mail que "la situación es muy grave. La enfermedad se extendió por Siria rápidamente, pero también alcanzó Irak, El Líbano, Turquía y el sur de Europa".

Los efectos de la enfermedad varían desde úlceras cutáneas que cicatrizan espontáneamente, hasta formas fatales, provocadas por inflamación grave del hígado y del bazo. La leishmaniasis se transmite a los humanos a través de la picadura de mosquitos pertenecientes a los géneros Phlebotomus.
Entre los años 2000 y 2012 se reportaron solo seis casos de la enfermedad en El Líbano. Pero solo en 2013 se registraron 1033 casos, un 96 % de los cuales afectaron a los desplazados sirios, informa el Ministerio de Salud de El Líbano.
tas/ktg/nal