El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Zeid Raad al-Husein, ha asegurado este martes estar “verdaderamente conmocionado” por el asesinato, cometido por las fuerzas de guerra israelíes (IDF, por sus siglas en inglés), de un manifestante palestino en silla de ruedas en Gaza.
Ibrahim Abu Thurayeh, un joven de 29 años que perdió ambas piernas en un ataque israelí hace una década, es uno de los cinco palestinos que murieron el viernes durante las protestas contra la controvertida decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer a Al-Quds (Jerusalén) como la capital del régimen israelí.
Al-Husein, que ha exigido una “investigación independiente e imparcial” sobre el asesinato del joven palestino para que los perpetradores del mismo rindan cuentas, ha tachado la decisión de Trump de “peligrosamente provocativa” asegurando que la violencia podría “remontarse directamente al anuncio unilateral de EE.UU. sobre el estatus de Al-Quds, que rompe el consenso internacional y fue peligrosamente provocativo”.
Dada su grave discapacidad, que debe haber sido claramente visible para quienes le dispararon, su asesinato es incomprensible, un acto verdaderamente impactante y sin sentido”, asegura el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al-Husein.
Abu Thurayeh, que se hallaba entre cientos de personas que marcharon a lo largo de la Franja de Gaza para protestar contra la decisión proisraelí del presidente estadounidense, recibió un disparo en la cabeza a 20 metros de distancia.
“Dada su grave discapacidad, que debe haber sido claramente visible para quienes le dispararon, su asesinato es incomprensible, un acto verdaderamente impactante y sin sentido”, ha asegurado el comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El lunes, el ejército israelí dijo que no había atacado a Abu Thurayeh deliberadamente y que no había encontrado evidencia alguna de “fallas morales o profesionales” en sus investigaciones. Sin embargo, conforme a Al-Husein, los hechos fuertemente señalan que la fuerza utilizada contra Abu Thurayeh fue excesiva y que “no hay nada en absoluto” que sugiera que el palestino estuviera planteando “una amenaza inminente de muerte” al ser asesinado.
Un vídeo grabado a primeras horas del viernes mostraba a Abu Thurayeh sosteniendo la bandera palestina y haciéndoles la señal de la victoria a los soldados israelíes.
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