“Serán puestos bajo arresto domiciliario todos los directivos del puerto de Beirut responsables del almacenamiento, protección e inspección de los materiales explosivos en un depósito desde 2014”, según ha informado este miércoles la ministra de Personas Desplazadas de El Líbano, Ghada Shreim.
La medida se produce un día después de que unas potentes explosiones sacudieran la zona portuaria de la capital Beirut y dejaran un saldo de un centenar de muertos y más de 4000 de heridos.
Las autoridades libanesas aún están investigando la causa principal de este incidente mortal, pero algunas conclusiones preliminares señalan el origen de la enorme explosión a las 2750 toneladas de nitrato de amonio almacenadas en el puerto, la cuales fueron incautadas en 2014 a un barco que se dirigía a África.
El ministro del Interior, Muhamad Fahmy, ha explicado que dicha decisión del Gobierno se dirigirá a las personas que desempeñaban altos cargos en el puerto. Además, ha indicado que esta medida incluirá una prohibición de viaje “para cualquier persona que tenga algún tipo de conexión con lo sucedido” en este incidente.
El funcionario libanés ha rechazado una investigación internacional sobre este siniestro y ha resaltado que el país cuenta con las “competencias necesarias” para realizar una investigación objetiva. “Lo más importante es hallar a los responsables”, ha agregado.
El Gobierno libanés ha declarado esta misma jornada el estado de emergencia por la grave situación causada por estas explosiones y ha anunciado una investigación para que los responsables paguen por lo sucedido.
A su vez, el presidente libanés, Michel Aoun, ha dado instrucciones a todas las Fuerzas Armadas del país para que trabajen para lidiar con las repercusiones de la gran explosión, patrullar los distritos afectados de la capital y los suburbios para controlar la seguridad.
myd/lvs/hnb/rba