“La Campaña Cero” (Campaign Zero), una organización que apoya la lucha contra la brutalidad policial, ha publicado recientemente un informe que muestra que 1365 personas fueron víctimas del la violencia policial en EE.UU. el año pasado.
Los estudios han demostrado que la mayoría de estas personas, más de la mitad de las cuales tenían entre 20 y 40 años, llamaron al 911 para pedir ayuda a la policía.
El aumento se produce cuando el impulso para reformar la estructura policial de Estados Unidos está disminuyendo cinco años después del asesinato de George Floyd en 2020, a la vez que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está poniendo fin a iniciativas destinadas a reducir la mala conducta policial.
El examen de las características de estas víctimas mostró que en el 7 0% de los casos padecían síntomas de enfermedad mental.
Como el caso de Sonya Massey, una mujer negra de Illinois que padecía esquizofrenia paranoide y llamó a la policía para denunciar que alguien había entrado ilegalmente en su propiedad y la policía le disparó tres veces.
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Residentes Negros
Asimismo, las investigaciones señalan la discriminación racial de la policía estadounidense al utilizar la violencia en Chicago; por ejemplo, los residentes negros tienen 30 veces más probabilidades de ser asesinados que los ciudadanos blancos.
¿Cómo funcionan?
El director ejecutivo de la Campaña Cero, DeRay Mckesson, dijo a Axios que los investigadores rastrean Internet a diario en busca de los últimos tiroteos policiales y los verifican para confirmar los detalles antes de incluirlos en la base de datos.
Si el personal no puede confirmar razonablemente la raza o etnia de una persona, esa persona se clasifica como de “raza desconocida”, declaró Mckesson.
En este sentido, la organización dice que su base de datos ha capturado el 92 % de todos los asesinatos policiales desde 2013.
La base de datos se basa en informes de los medios de comunicación para rastrear cualquier incidente en el que un agente de la ley, ya sea en servicio o fuera de servicio, utilice la fuerza y provoque la muerte de alguien.
“Este aumento de la violencia policial, incluso cuando los homicidios y los delitos violentos disminuyen en todo el país, es una tendencia profundamente preocupante que exige soluciones respaldadas por datos”, afirmó la Campaña Cero en un comunicado.
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