El impeachment contra Donald Trump llega a su recta final. Este martes, los demócratas y republicanos en el Senado estrenaron su último enfrentamiento un día antes de la votación final. El líder de la mayoría republicana en el Senado inició la sesión con una evaluación lapidaria de los argumentos de los demócratas. Y aseguró que las acusaciones contra Trump son incoherentes y no están ni cerca de sustentar la primera destitución de un presidente en la historia de EE.UU.
El senador por Kentucky esquivó las preguntas de si las acciones de Trump, al presionar al presidente ucraniano para que anunciara una investigación al rival político Joe Biden, eran inapropiadas. Incluso, negó a los demócratas la posibilidad de convocar testigos ante el Senado y ha colaborado estrechamente con la Casa Blanca para guiar el caso en el Senado. Por lo que, el líder del bloque demócrata acusó a Mitch McConnell y sus correligionarios de barrer la mala conducta de Trump debajo del tapete.
A pesar de que se espera que el Senado absuelva a Trump porque está compuesto de mayoría republicana, con 53 senadores frente a los 47 demócratas, aún existe cierta incertidumbre sobre el margen que arrojará la votación final, ya que puede suceder que algún republicano cruce a las líneas demócratas como ocurrió con Mitt Romney y Susan Collins, quienes votaron a favor de citar testigos.
Entre tanto, Trump se prepara para dar su discurso del Estado de la Unión. Una intervención que usará para resaltar las victorias de su Gobierno con vistas a ser reelegido en las elecciones.
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