“Están arraigando nuevos vínculos que hasta hace poco eran inimaginables”, ha señalado este jueves el jefe de la Diplomacia estadounidense, en alusión al acercamiento entre Israel y países árabes ribereños del Golfo Pérsico, como Omán y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que son Estados musulmanes sin relaciones formales con el régimen de Tel Aviv.
En declaraciones ofrecidas en una rueda de prensa en el El Cairo (la capital egipcia), el secretario estadounidense de Estado ha destacado, en concreto, el viaje en octubre de 2018 del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a Omán, donde se reunió con el rey omaní, el sultán Qabus bin Said.
Pompeo ha mencionado también la visita oficial que hizo el mismo octubre de 2018, la ministra de cultura y deportes de Israel, Miri Regev, a Abu Dabi, la capital de los Emiratos Árabes Unidos, para acompañar al equipo de judo en el torneo del “Grand Slam”, siendo la primera ocasión que se les permitía a los atletas israelíes competir bajo una bandera israelí de facto en los EAU.
Actualmente, el régimen de Tel Aviv solo tiene relaciones diplomáticas con dos países árabes: Egipto y Jordania. No obstante, otros Estados árabes, como Arabia Saudí, los EAU y Baréin, están desde hace un tiempo suavizando gradualmente su postura política frente a Israel, lo cual, según los analistas, es un intento para preparar a la opinión pública de sus pueblos y a la comunidad internacional para una futura normalización de nexos con Israel.
Están arraigando nuevos vínculos que hasta hace poco eran inimaginables”, ha señalado el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, en alusión al acercamiento entre Israel y algunos países árabes ribereños del Golfo Pérsico, como Omán y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que son Estados musulmanes sin relaciones formales con el régimen de Tel Aviv.
Tras elogiar los pasos dados por Omán y los EAU, el titular norteamericano ha llamado a los países de Asia occidental para que dejen de lado las antiguas discrepancias y que se unan “para enfrentar a Irán” en la región.
Pompeo ha alabado, igualmente, el enfoque antiraní adoptado por el presidente estadounidense, Donald Trump, evocando la salida unilateral de Washington del pacto nuclear de 2015 suscrito entre Teherán y el Grupo 5+1 (entonces integrado por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Gira de Pompeo al Oriente Medio
El secretario de Estado estadounidense inició el martes una gira por el Oriente Medio, en una agenda que, conforme había anunciado con anterioridad el Departamento que dirige, abarcaría ocho países de la región, a saber: Jordania, Egipto, Baréin, los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Catar, Arabia Saudí, Omán y Kuwait. Sin embargo, Pompeo hizo el miércoles una visita sorpresa a Irak.
En su visita a Jordania, Pompeo dijo que Washington, con tal viaje, trataba de convencer a los países del Oriente Medio para que se sumaran a la campaña de presión contra Teherán y aseguró que EE.UU. no escatimaría esfuerzos para presionar a Irán y a todos aquellos que apoyen al país persa.
Irán denuncia que EEUU ha reemplazado su política exterior por la iranofobia
El canciller de Irán, Mohamad Yavad Zarif, volvió a denunciar el martes que el Gobierno de Estados Unidos había reemplazado su política exterior con “la obsesión y la iranofobia”, reaccionado, de este modo, a las declaraciones antiraníes realizadas por Pompeo, y el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., John Bolton (que también hizo una visita reciente a la región).
El portavoz de la Cancillería iraní, Bahram Qasemi, afirmó, a su vez, que las acciones hostiles de Estados Unidos no han tenido éxito, a pesar de todos los intentos para oprimir al pueblo iraní, y ciertamente no lo tendrán en el futuro.
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