"No tenemos pruebas de que las interferencias rusas cambiasen el resultado de las elecciones (...) pero tentemos amplias evidencias convincentes de que lo intentaron, y eso es algo muy serio", dijo McCain el sábado en rueda de prensa en Bruselas, por ello pide al presidente de EE.UU., Donald Trump, que condene las presuntas injerencias de Rusia en dichas elecciones.
McCain alude a las denuncias que investiga el Buró Federal de Investigaciones de EE.UU. (FBI, en inglés) sobre el hackeo, supuestamente ruso, de los servidores informáticos del Partido Demócrata, que perjudicaron a Hillary Clinton (rival de Trump) en las elecciones presidenciales del pasado 8 de noviembre de 2016.
No tenemos pruebas de que las interferencias rusas cambiasen el resultado de las elecciones (...) pero tentemos amplias evidencias convincentes de que lo intentaron, y eso es algo muy serio", dijo el senador republicano John McCain el sábado en rueda de prensa en Bruselas.
El senador republicano alertó además sobre el peligro que albergan esas supuestas prácticas de Moscú para otros países occidentales.
"Sabemos que están intentado influir en las elecciones francesas. Lo sabemos, es información pública" agregó McCain, advirtiendo de que si Rusia lograra afectar un resultado electoral en dicho país supondría un ataque "fundamental" a la democracia.
De otro lado, John Schindler, exanalista de la Agencia Nacional de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA, por sus siglas en inglés), aseguró el viernes que si se confirma que el equipo de campaña del presidente de EE.UU., Donald Trump, cooperó con Rusia para perturbar las elecciones presidenciales, este caso podría poner fin al mandato del actual jefe de la Casa Blanca.
En diciembre pasado un informe secreto de la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU, (la CIA, por sus siglas en inglés) reveló que Rusia intervino en las elecciones para llevar a Trump a la victoria. También, un documento elaborado por la Comunidad de Inteligencia de EE.UU. (USIC, en inglés), confirmó la supuesta piratería rusa. Moscú, a su vez, ha negado tajantemente cualquier implicación en estos asuntos.
Desde que Trump asumió la presidencia de Estados Unidos ha sido blanco de constantes críticas por su postura respecto a Rusia y su insistencia en buscar mejores relaciones entre Washington y Moscú.
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