Un alto cargo de las Fuerzas de la Resistencia Popular de Irán (Basich), Nosratolá Saif, ha advertido hoy viernes de que si Washington comete el menor error hacia los intereses nacionales de la República Islámica, tiene que saber que 36 de las bases militares que mantiene en la zona están al alcance misilístico de Irán.
“Estados Unidos tiene miedo de este asunto y lo sabe muy bien que sus buques de guerra podrían ser blanco de los misiles iraníes. Si se realiza un disparo hacía el país persa, recibirán una lluvia de los misiles de la República Islámica (de tal manera) que quedará registrado en la historia”, ha afirmado.
El general Seif ha mencionado los esfuerzos que las autoridades norteamericanas han hecho durante años para derrotar el nuevo sistema establecido, recurriendo a la matanza del pueblo y los funcionarios gubernamentales, pero su plan fracasó debido a la resistencia del pueblo.
Estados Unidos tiene miedo de este asunto y lo sabe muy bien que sus buques de guerra podrían ser blanco de los misiles iraníes. Si se realiza un disparo hacía el país persa, recibirán una lluvia de los misiles de la República Islámica (de tal manera) que quedará registrado en la historia”, ha afirmado el general Nosratolá Saif, comandante de las Fuerzas de la Resistencia Popular de Irán (Basich).
Los ocho años de guerra impuesta a Irán, ha apostillado, fue uno de los complots orquestados por el Occidente, encabezado por EE.UU, y fue la única guerra en el mundo en la que todos los poderes mundiales se habían alineado a favor de una parte de la guerra, es decir el régimen del exdictador iraquí Saddam Husein, pero fue Irán el que salió victorioso gracias a Dios y la valentía de los jóvenes iraníes.
“Hoy en día, esta guerra se ha convertido en un ejemplo militar en el mundo. En Yemen, Siria, Palestina y otros países no islámicos ya aprovechan de las tácticas utilizadas en la defensa sagrada de Irán”, ha recalcado.
En los últimos años, Irán ha logrado importantes avances en su sector de la defensa y alcanzado la autosuficiencia en la producción de equipos y sistemas militares defensivos vitales, con lo que sus Fuerzas Armadas están al día en tácticas militares modernas.
No obstante, Teherán siempre ha enfatizado que su poder militar no constituye amenaza alguna para la región, pues únicamente busca preservar su propia soberanía e integridad territorial.
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