“Queremos la paz, pero estamos preparados para cualquier escenario y sugiero que nadie nos ponga a prueba”, ha alertado el premier israelí a los Estados del Oriente Medio, y aunque no ha mencionado a ningún país en concreto, todo apunta a El Líbano debido a las recientes tensiones entre las dos partes.
Durante su reunión con oficiales del mando norte de las fuerzas de guerra de Israel (IDF, por sus siglas en inglés), Netanyahu se ha manifestado “impresionado” por el trabajo de los militares israelíes desplegados en los altos de Golán, donde el cruce de ataques entre Siria y el régimen de Tel Aviv es algo frecuente.
La visita de Netanyahu, una provocación en sí misma, se ha realizado en la misma jornada en la que el presidente de El Líbano, Michel Aoun; el primer ministro, Saad Hariri; y el presidente del Parlamento, Nabih Berri, divulgaban un comunicado conjunto, advirtiendo a la parte israelí ante la construcción de un muro en la parte libanesa de los altos de Golán.
Queremos la paz, pero estamos preparados para cualquier escenario y sugiero que nadie nos ponga a prueba”, dice el primer ministro de Israel, Benyamin Netanyahu, en una implícita advertencia a El Líbano.
En la nota, las autoridades libanesas aducen que las medidas y amenazas del régimen de Tel Aviv suponen un riesgo directo para la estabilidad regional, y por ello prometen que presentarán iniciativas “a nivel regional e internacional” con el fin de impedir futuras crisis.
Durante su visita a los altos de Golán, Netanyahu también ha aprovechado la coyuntura para felicitar a los militares por el asesinato del joven palestino Ahmad Yarrar. En contraposición, los Movimientos de Resistencia Islámica de El Líbano y de Palestina, Hezbolá y HAMAS, respectivamente, han condenado tajantemente el tiroteo indiscriminado de los soldados israelíes contra Yarrar.
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