• Yemeníes marchan en apoyo a Palestina en Saná, capital.
Publicada: martes, 28 de julio de 2020 1:51

El movimiento popular yemení Ansarolá dice que es blanco de ataques y del férreo bloqueo saudí por su postura propalestina y por apoyar la causa palestina.

Dos representantes de Ansarolá acudieron el lunes a la sede del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) en Saná, capital de Yemen, para entregar una carta del movimiento popular yemení al jefe de la dirección política de HAMAS, Ismail Haniya.

Al entregar la carta, los enviados de Ansarolá destacaron que la agresión saudí a su país y el asedio aéreo, terrestre y marítimo que impone a la nación tienen sus raíces en la importancia de la causa palestina entre los yemeníes, apoyar a movimientos de la Resistencia Islámica en Palestina y El Líbano, así como su rechazo a la hegemonía de Israel y de EE.UU.

“Palestina es la primera causa para el pueblo yemení y es una brújula que determina la postura y las pautas de la comunidad musulmana”, afirmo Ansarolá.

 

La representación de HAMAS, a su vez, expresó su agradecimiento a la solidaridad de Ansarolá y el pueblo yemení con los palestinos oprimidos y denunció la postura de ciertos “Gobiernos títeres” que buscan la normalización de lazos con el régimen usurpador de Tel Aviv.

Sin embargo, aseguró que los favores que están ofreciendo estos Gobiernos a Israel, no les harán inmunes ante los complots y las conspiraciones del enemigo sionista.

Ansarolá también ha denunciado ataques israelíes y los complots que urde con EE.UU. para las tierras que no son suyas, entre ellos, el llamado ‘acuerdo del siglo’ de EE.UU., al que conidera “una violación flagrante” a la soberanía palestina.

De igual modo, ha matizado que cualquier plan para solucionar el conflicto palestino-israelí debe basarse en las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) y la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU). Además, debe contemplar los derechos fundamentales de los palestinos como el derecho al retorno y fundar un Estado soberano con Al-Quds (Jerusalén) como capital, asegura.

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