El portavoz del Ejército de Yemen, el teniente general Yahya Sari, escribió el jueves en su cuenta de Twitter que las fuerzas lideradas por Arabia Saudí han llevado a cabo más de 32 ofensivas e intentos de infiltración desde el 9 de abril, agregando que las operaciones se realizaron en las provincias Al-Yawf (noroeste), Marib (noroeste) y Al-Bayda (oeste), y la provincia de Taizz (suroeste).
Sari, asimismo, señaló que la llamada coalición liderada por Arabia Saudí ha lanzado 230 ataques aéreos desde el pasado jueves, indicando que los ataques se realizaron en las provincias de Marib, Al-Bayda, Saada (norte), Sana (capital), Al-Hudayda (oeste) y Amran (norte).
También, la televisión yemení Al Masirah ha informado que, pese a la tregua anunciada por Riad, aduciendo la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la enfermedad COVID-19, los aviones de combate de la coalición saudí han bombardeado este viernes ocho veces el área de Saleb en la provincia de Marib, y siete veces dos áreas en la provincia de Al-Yawf.
El general Sari, en este contexto, destacó que las fuerzas armadas yemeníes tomarán medidas prácticas para defender el país y a los yemeníes, y disuadir a la coalición liderada por Riad de sus actos de agresión.
Por otra parte, según informes, el mismo jueves, varios civiles, incluidas mujeres, sufrieron heridas cuando aviones de combate dirigidos por Arabia Saudí atacaron un edificio residencial en el distrito de al-Marawiah de la provincia de Al-Hudayda, en el oeste de Yemen.
La contienda militar saudí ha dejado más de 100 000 muertos y miles de heridos entre la población civil yemení, según el proyecto Datos sobre Localización y Acontecimientos de Conflictos Armados (Acled, por sus siglas en inglés).
No obstante, transcurridos cinco años de la agresión saudí, el régimen de los Al Saud no ha logrado doblegar al pueblo yemení. Las fuerzas del Ejército de Yemen y los combatientes del movimiento popular Ansarolá lanzan frecuentes ataques de represalia contra objetivos del enemigo.
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