“Indudablemente, Israel es el principal beneficiario de los recientes desarrollos. Me gustaría advertir a ciertos exaltados en Jerusalén (Al-Quds) contra sobrestimar su ventaja. También les recordaría, entre otras cosas, que la anexión de los altos del Golán, como ahora dicen muchos, sigue siendo totalmente inaceptable. Israel debe volver a cumplir íntegramente con el conocido acuerdo de 1974 con Siria”, ha avisado este lunes el viceministro ruso de Exteriores, Serguéi Riabkov, en una entrevista con el Centro Analítico de la agencia local TASS.
Al ser preguntado sobre qué actores externos están involucrados “tras bastidores” en la crisis siria, Riabkov ha respondido que “Estados Unidos está sin lugar a dudas presente”.
El pasado 27 de noviembre, grupos armados liderados por Hayat Tahrir al-Sham (HTS) lanzaron una ofensiva sorpresa a gran escala desde el noroeste de Siria.
En menos de dos semanas, las fuerzas antigubernamentales se hicieron con el control de varias ciudades importantes como Alepo, Hama y Homs y entraron el 8 de diciembre en Damasco, donde proclamaron la caída del gobierno de Bashar al-Asad.
Aprovechando el vacío de poder en Siria, el ejército israelí ha procedido a provocar más inestabilidad en el país árabe, tomando el control de la zona de amortiguamiento en los altos del Golán ocupados, y lanzando ataques aéreos contra bases militares, estaciones de defensa aérea, sedes de inteligencia y depósitos de armas en diversas partes de Siria.
Nada más comenzar dichos actos, que violan la integridad territorial de Siria, el gabinete del premier israelí, Benjamín Netanyahu, ha aprobado un plan para ampliar los asentamientos de colonos en los ocupados Altos del Golán sirios.
Varios países de la región han alertado que Israel está abusando de la situación caótica en Siria para apoderarse de más territorio.
tqi/ctl/mkh