Durante una reunión mantenida con su par turco, Numan Kurtulmus, al margen de la 149.ª Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UI) en Ginebra (Suiza), el presidente del Parlamento iraní, Mohamad Baqer Qalibaf, ha afirmado que en el nuevo siglo, los crímenes del régimen sionista contra Palestina y el Líbano se consideran un fenómeno amargo.
“Debemos examinar esta cuestión en diversos aspectos de seguridad, políticos, económicos y sociales. Este incidente es tan importante que debemos saber que cada día marcará los próximos años”, ha alertado.
Al respecto, ha señalado que los países, especialmente las naciones islámicas, deben cooperar entre sí a nivel político y popular, y prestar suficiente apoyo a los pueblos del Líbano y Palestina.
El máximo legislativo de Irán ha aseverado que Estados Unidos está detrás de todos los acontecimientos en la región, insistiendo en que el envío de ayuda al Líbano es una de las prioridades que los países deben tomar, y refiriéndose a su viaje a Beirut (capital libanesa), ha subrayado la necesidad de formar un mecanismo para suministrar los artículos básicos a la gente del sur del Líbano. En este contexto, ha pedio trabajar para establecer la Media Luna Roja en Beirut para que las ayudas humanitarias lleguen por aire y mar.
El presidente del Parlamento turco, por su parte, ha afirmado que Gaza y Palestina no son los únicos objetivos de Israel, sino todas las naciones de la región están en su mira: “El régimen sionista no hace ninguna distinción entre países y continúa con sus acciones antihumanas de manera extrema”, ha agregado.
Kurtulmus ha matizado que gracias a la denuncia de Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), los países tienen acceso oficial para demandar contra Israel y se puede documentar los crímenes del régimen sionista.
“Debemos rechazar a Israel en los foros internacionales y crear unidad entre la Ummah (comunidad) islámica” ha aseverado denunciado que el poder de Israel no se debe sólo a las armas, los medios y el apoyo occidentales, sino también a la falta de unidad de los musulmanes.
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