“La juventud venezolana, la juventud iraní debe saber que el mundo de futuro será un mundo de justicia, sin imperialismo, un mundo de igualdad. Y nos toca a nosotros dos construir este mundo”, ha señalado Maduro en una rueda de prensa conjunta con su par iraní, Seyed Ebrahim Raisi, en Teherán, capital de Irán, donde se encuentra el mandatario venezolano desde el viernes en una visita oficial.
El jefe de Estado venezolano ha indicado que Caracas y Teherán crecerán en los próximos años “frente a dificultades”. “Creo que entre nosotros dos va a crecer una amistad indestructible”, ha agregado.
En este sentido, ha ratificado “todo el apoyo” de la Revolución Bolivariana de Venezuela a la República Islámica.
Los dos dignatarios mantuvieron de manera previa a su sesión informativa una reunión, la cual Maduro ha descrito como “una jornada de conversaciones y entendimientos muy profundos”.
Mapa de cooperación Irán-Venezuela, “verdaderamente asombroso”
“Hemos llegado a este año 2022 en mejores condiciones, más preparados y más fuertes para articular la fuerza de Irán y Venezuela en un mapa de cooperación verdaderamente asombroso”, ha anunciado.
De hecho, Maduro y Raisi han firmado un documento de cooperación de 20 años, en un momento en que ambos países son objeto de las duras sanciones de Estados Unidos.
“Venezuela pasó años duros, turbulentos, producto de las agresiones del imperialismo. Los años 2017, 2018, 2019, 2020. Durísimo. Pero Venezuela resistió. Venezuela contuvo la agresión y Venezuela entra en una etapa de recuperación real y verdadera”, ha subrayado Maduro.
Venezuela aprende de Irán para recuperar su economía
En la misma línea, Maduro ha señalado que Venezuela seguirá esforzándose “para consolidar la recuperación económica integral, para expandir las fuerzas productivas de nuestro país, aprendiendo de la experiencia histórica de nuestra hermana República Islámica de Irán, poniendo el conocimiento, la ciencia y la tecnología en el centro de los esfuerzos”.
A su juicio, los dos países tienen “grandes frentes de cooperación” a nivel energético, del petróleo, del gas, la refinería, la petroquímica, a nivel financiero con el Banco Nacional de Desarrollo Irán-Venezuela y en el ámbito de la defensa.
El 18 de julio se abre el vuelo directo Caracas-Teherán
En este sentido, se ha referido al hecho de que “el próximo 18 de julio se abre el vuelo directo Caracas-Teherán, que va a promover el turismo y la unión entre los dos pueblos”.
Irán ha hecho un “milagro económico”
En otro momento de sus declaraciones, el presidente bolivariano ha recalcado que Irán, “en estos años, ha hecho un milagro económico y en la producción de todos sus alimentos”.
Esto, ha proseguido, mientras que “el territorio de Irán es 70 por ciento más o menos de desierto. Así que ellos están produciendo alimentos en el 30 por ciento del territorio” y con tecnología propia producen alimentos en zonas desérticas, ha alabado.
Conforme ha dado a conocer, Venezuela ha priorizado a su vez dos cosas: “la primera la cooperación tecnológica para producir más alimentos en Venezuela,” para seguir elevando su producción alimentaria con recursos propios en tierras venezolanas; y la segunda “los proyectos conjuntos Irán-Venezuela para producir alimentos en Venezuela para exportar a Irán y a toda la región de Asia”.
Efectivamente, ha catalogado de “fundamental” la consolidación de la soberanía y la seguridad alimentaria de Venezuela.
Raisi loa lazos Irán-Venezuela
Por su parte, el presidente de Irán ha elogiado las relaciones estratégicas entre ambos países frente al imperialismo.
A su criterio, la firma del documento de cooperación de 20 años es una muestra de la voluntad de las altas autoridades de ambos países para ampliar los lazos en diferentes áreas.
En este contexto, Raisi ha elogiado la resistencia de Venezuela ante las sanciones y amenazas del imperialismo”, las mismas que han castigado al pueblo de Irán “durante más de 40 años”.
El mandatario persa ha considerado “una gran victoria para la nación persa” el reconocimiento por la Casa Blanca del “vergonzoso fracaso” de la campaña de ‘presión máxima’, promovida por la anterior Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, contra la República Islámica.
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