La séptima ronda de los diálogos entre Irán y el G4+1 está por comenzar este lunes, 29 de noviembre, en Viena, capital de Austria, donde el país persa persigue la eliminación total de las sanciones estadounidenses en su contra, lo que permitiría la revitalización del acuerdo nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), cuya vigencia pende de un hilo, tras la decisión unilateral de Washington de abandonarlo en 2018 y la inacción de los signatarios europeos del convenio para garantizar los intereses de Teherán.
El jefe negociador iraní en esas conversaciones, Ali Baqeri Kani, quien llegó el sábado a Viena, volvió a enfatizar que el levantamiento verificable de las sanciones antiraníes es el primer objetivo de la República Islámica en la cita y señaló como segundo objetivo “facilitar los derechos legales de la nación iraní para beneficiarse del conocimiento nuclear pacífico, especialmente la importantísima tecnología de enriquecimiento para fines industriales, de acuerdo con los términos del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP)”.
Sin embargo, en un artículo publicado el domingo en el diario británico Financial Times, Baqeri Kani advirtió de que, “en base a la experiencia de Irán, el Occidente no busca implementar un acuerdo”, sino que quiere desviar sigilosamente la percepción pública para no asumir sus compromisos de cualquier manera posible.
De hecho, remarcó, el Occidente busca utilizar la plataforma del PIAC para “obligar a Irán a dar más concesiones en áreas no relacionadas con el tema nuclear, [por lo que] el pueblo iraní no confía ni en el proceso [de las conversaciones] ni en su resultado”, agregó Baqeri Kani.
Occidente ha de pagar el precio de no haber cumplido con sus compromisos en PIAC
El diplomático persa resaltó que EE.UU. y sus aliados europeos “deben pagar un precio por no haber cumplido con su parte del acuerdo” para “garantizar que cualquier pacto futuro sea invulnerable”.
Irán descarta un “cumplimiento mutuo” del acuerdo nuclear
Teherán reitera que EE.UU. es la parte que debe dar el primer paso para compensar su infracción del PIAC, levantando todas las sanciones contra Irán; no obstante, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha actuado, desde que asumió el cargo, en línea con la postura de su antecesor, Donald Trump; es decir, insistiendo en un “retorno mutuo” al acuerdo, lo que el país persa rechaza.
En este sentido, Baqeri Kani, también vicecanciller de Irán para Asuntos Políticos, rechazó lo que los firmantes occidentales han dado en llamar el “cumplimiento mutuo” del pacto nuclear, pues, este principio “no puede ser una base adecuada para las negociaciones, ya que fue el Gobierno de Estados Unidos fue el que abandonó unilateralmente el acuerdo”, explicó.
Para el funcionario iraní Washington tiene la obligación de demostrar que tiene la competencia necesaria para cumplir con sus compromisos, si quiere que se reavive el PIAC. Asimismo, pidió a las otras partes del pacto que proporcionen a Irán un mecanismo claro y transparente que garantice que una eventual eliminación de los embargos norteamericanos no será temporal.
Irán nunca sucumbirá a la política de amenazas y sanciones de EE.UU.
Conforme a Baqeri Kani, Irán nunca ha sucumbido ante las amenazas militares ni las sanciones económicas de EE.UU. bajo la Administración de Trump, ni lo hará con Biden como inquilino de la Casa Blanca, afirmó.
Dejó claro también que, si el Occidente actúa con buena fe, Irán está dispuesto a cumplir voluntariamente con sus compromisos nucleares, los cuales empezó a reducir un año tras la salida del lado norteamericano del PIAC, según le autorizan los artículos 26 y 36 del pacto.
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