En una reunión mantenida el viernes con su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian, al margen del 76.° período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) que se desarrolla en Nueva York (EE.UU.), el canciller iraní, Hosein Amir Abdolahian, resaltó que el actual Gobierno de la República Islámica de Irán se muestra “pragmático” y considera que las negociaciones son una herramienta diplomática muy importante.
“Irán está listo para volver a las conversaciones y está estudiando rápidamente la historia de rondas de conversaciones anteriores”, ha agregado.
Sin embargo, el jefe de la Diplomacia persa expresó su pesar por el incumplimiento de Estados Unidos y la troika europea (el Reino Unido, Francia y Alemania) de sus obligaciones estipuladas en el acuerdo nuclear —de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés)—, y enfatizó que “respecto al regreso a la mesa de negociaciones, solo los resultados prácticos y tangibles son de suma importancia para el pueblo iraní”.
En este sentido, Amir Abdolahian recordó que la actual Administración estadounidense no ha tomado ninguna medida seria y práctica para volver a sus compromisos y, por el contrario, ha impuesto nuevas sanciones a Teherán. “Irán duda de la seriedad de la Administración de Biden para volver al PIAC”, reiteró.
Por su parte, el canciller francés afirmó que su país está preocupado por el retraso en la reanudación de las conversaciones nucleares, reiterando que Francia está interesada en reanudar estos diálogos lo antes posible.
Irán denuncia que el Gobierno de Biden está enviando una “señal negativa” al no levantar las sanciones económicas e imponer nuevos embargos al país persa, mientras que afirma estar listo para volver a sus obligaciones con respecto al acuerdo nuclear.
El nuevo Gobierno de Irán reitera que reanudar los diálogos —que se enfrenta a una pausa de tres meses tras las elecciones presidenciales en el país persa— está en su agenda, pero no deben llevarse a cabo bajo la presión occidental, y precisa que Estados Unidos primero debe levantar todas las sanciones que impuso contra Teherán tras su salida unilateral en mayo de 2018 del PIAC.
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