El domingo, la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI) informó de un incidente en la red de distribución eléctrica del complejo nuclear Shahid Ahmadi Roshan, en la planta nuclear de Natanz (centro). Las autoridades iraníes dijeron, no obstante, que este “acto de terrorismo nuclear” no dejó “víctimas ni contaminación”.
Al respecto, el portavoz del Gobierno iraní, Ali Rabiei, ha afirmado este martes que “la República Islámica se reserva el derecho a actuar contra los perpetradores de este ataque” y “está comprometido con dar respuesta adecuada en el momento y lugar adecuado”.
Rabiei ha subrayado que este último “acto terrorista” muestra la derrota de los enemigos ante el progreso industrial y político del país persa.
Por ello, ha enfatizado que Irán “no permitirá que los enemigos logren sus objetivos políticos” y continuará firmemente su camino de desarrollo en el sector de la tecnología nuclear y expansión de las actividades nucleares con fines pacíficos, ha agregado.
El vocero persa ha dicho también que la República Islámica hará todos sus esfuerzos para hacer frente a las sanciones ilegales impuestas en su contra, a fin de garantizar así los derechos del pueblo iraní.
Irán llama a AIEA a condenar “acto de terrorismo” en su planta nuclear
Además, ha enfatizado la necesidad de que la comunidad internacional y la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) condenen este “terrorismo nuclear”.
Entretanto, refiriéndose a los anteriores esfuerzos de Israel para evitar el desarrollo del país persa en el campo de energía nuclear, Rabiei ha considerado bastante claro que el régimen de Tel Aviv esté detrás de este ataque.
De hecho, ha indicado que Israel no pudo alcanzar su objetivo y, aunque el sabotaje había causado temporalmente un daño limitado a la actividad de enriquecimiento de uranio, una gran parte del daño se repararía a corto plazo y se utilizarían tecnologías más nuevas en el proceso de reconstrucción, ha continuado. Como ejemplo, ha agregado que se decidió reinstalar las centrifugadoras más avanzadas IR6 en lugar de las centrifugadoras IR1.
En otra parte de sus declaraciones, el portavoz del Gobierno iraní ha abordado el tema del acuerdo nuclear firmado en 2015 —de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés)—, insistiendo en que el fin de sanciones es la única opción para que Irán revierta los pasos en reducir sus compromisos nucleares.
“Es el turno de Estados Unidos de demostrar que es serio a la hora de regresar al PIAC”, ha resaltado Rabiei, enfatizando que si Washington está listo para respetar sus obligaciones, pues Irán también cumplirá con todos sus compromisos. De lo contrario, ha añadido, “el paso del tiempo puede hacer mucho más difícil revivir” el convenio.
Cabe mencionar que el incidente de Natanz coincide con las conversaciones en curso entre los representantes de Teherán y las cinco potencias firmantes del acuerdo nuclear de 2015 en Viena (Austria) para salvar el pacto y levantar las sanciones unilaterales estadounidenses contra el país persa.
El régimen de Israel es un firme oponente de ese pacto y, en los últimos años ha recurrido a todos los medios, incluidos actos terroristas y sabotajes para descarrilarlo y torpedear el programa de energía nuclear con fines pacíficos de Irán.
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