Según los medios, este jueves por la tarde, ha acaecido un “grave incidente de seguridad en el norte de la Franja de Gaza”, que provocó un muerto y siete heridos, algunos de ellos graves, entre el ejército israelím como resultado del ataque con un misil antitanque y una operación de francotiradores en dicha zona.
Por temor a un ataque de francotiradores, la policía israelí ha impuesto una prohibición a los colonos para entrar en una zona adyacente a la Franja de Gaza, en el asentamiento de Sderot.
También se han avistado helicópteros israelíes moviéndose al norte de la Franja de Gaza y evacuado a soldados heridos al hospital Soroka en Beerseba después de la emboscada de la Resistencia.
Hace unos días, un oficial israelí murió y otros cinco resultaron heridos en una emboscada llevada a cabo por las Brigadas Ezzedin Al-Qassam en Beit Hanun, al norte de la Franja de Gaza.
En ese momento, las Brigadas Ezzedin Al-Qassam, brazo militar del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), realizaron una compleja emboscada denominada “Rompiendo la Espada” al este de Beit Hanun, apuntando a un jeep militar ‘Storm’, del ejército israelí con un misil antitanque, infligiendo bajas confirmadas.
Cuando llegó la fuerza de apoyo israelí para una operación del rescate, fue atacada por una bomba antipersonal, lo que provocó bajas entre su personal, según las Brigadas Al-Qassam.
Transcurridos 18 meses del inicio de la guerra genocida israelí en Gaza, los movimientos de Resistencia palestinos siguen sorprendiendo con ataques a las tropas israelíes dentro del enclave y en operaciones con misiles contra ciudades situadas en la profundidad de la Palestina ocupada.
La oposición israelí tacha de un fracaso total la guerra en Gaza y acusa al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de prolongar el conflicto para garantizar su supervivencia política.
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