En la ciudad de Beit Lahia, en el norte de la Franja de Gaza, se están viviendo momentos desgarradores, luego de que la noche del sábado y el amanecer de este domingo han traído consigo el trágico eco de ataques aéreos del régimen israelí, según las autoridades sanitarias del enclave.
“La pesadilla en Gaza se está intensificando. Se están produciendo escenas horrorosas en el norte de la Franja en medio del conflicto, los incesantes ataques israelíes y una crisis humanitaria que empeora cada vez más”, ha denunciado este domingo el coordinador especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el proceso de paz en Asia Occidental, Tor Wennesland.
Ha asegurado que “ningún lugar es seguro en Gaza” y ha llamado a frenar el éxodo de palestinos y a la protección de los civiles como una medida prioritaria, sin importar dónde se encuentren.
Horrifying scenes unfolding in Gaza, amidst conflict, relentless Israeli strikes & an ever-worsening humanitarian crisis. I condemn the continuing attacks on civilians. Hostages must be freed, displacement of Palestinians must cease, & civilians must be protected.
— Tor Wennesland (@TWennesland) October 20, 2024
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El Ministerio de Salud de Gaza ha informado que al menos 87 personas han perdido la vida o se encuentran en paradero desconocido tras los recientes bombardeos aéreos israelíes en Beit Lahia.
El ataque israelí contra Beit Lahia ha tenido entre sus blancos el Hospital Kamal Adwan, cuya infraestructura ha sido destruida, incluidos los tanques de agua y la red eléctrica del centro, así lo informó Hussam Abu Safia, director del nosocomio.
El impacto devastador en esta vital instalación ha perturbado gravemente los servicios médicos, ha añadido el funcionario gazatí.
Abu Safia ha manifestado que la zona circundante al hospital había sido testigo de un asedio con incesantes bombardeos aéreos y disparos de artillería durante horas interminables, amenazando la seguridad de pacientes y profesionales de la salud en un ambiente de caos.
El asalto al hospital forma parte de una ofensiva más extensa, marcada por una ola continua de bombardeos aéreos y cañonazos que han golpeado al norte de Gaza durante los últimos 16 días.
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