El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados de Palestina ha indicado que el primer ministro israelí, Naftali Bennett, está aprovechando la próxima visita de Joe Biden a la región y está corriendo contrarreloj para implementar la mayor cantidad posible de proyectos y esquemas coloniales racistas en los territorios ocupados palestinos, especialmente en Al-Quds (Jerusalén), con el objetivo de convertirlo en un hecho consumado difícil de cambiar y dirigir las críticas estadounidenses al mismo.
En su comunicado, la Cartera palestina ha resaltado que el gabinete israelí encabezado por Bennett tiene “la responsabilidad total y directa por las continuas violaciones y crímenes a los que está expuesto Al-Quds Este ocupado”.
Además, ha explicado que sigue de cerca lo que comete Israel a diario en Al-Quds y contra los ciudadanos y los lugares sagrados de esta ciudad.
En este contexto, ha asegurado que el caso de Al-Quds es la prioridad en su agenda de trabajo a todos los niveles internacionales y multilaterales en un esfuerzo por movilizar el más amplio frente internacional en rechazo a la ocupación y las medidas israelíes en Al-Quds, ya que es la clave para la paz en la región.
Biden viajará a Asia Occidental del 13 al 16 de julio, comenzando con una parada en los territorios ocupados por Israel y Cisjordania antes de aterrizar en Arabia Saudí, ha confirmado este martes la Casa Blanca en un comunicado.
En varias ocasiones, las autoridades palestinas han instado a la comunidad internacional a tomar medidas prácticas para poner fin a las políticas expansionistas del régimen israelí, cuyos asentamientos son considerados ilegales por las Naciones Unidas y la mayoría de los países del mundo.
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