“¡Compatriotas, la resistencia ya está dentro del Congreso y no vamos a parar!”, ha exclamado Ortega este domingo en un acto en la capitalina plaza de Margareth Thatcher, después de que el escrutinio de los votos emitidos en las elecciones generales españolas otorgara a la formación liderada por Santiago Abascal 24 votos.
El abogado y exmilitar hispanoargentino se ha arrogado en nombre de su partido haber determinado “los grandes debates de la política” española en los últimos tiempos, cuando ha destacado por su presencia como acusación en el juicio de los líderes independentistas catalanes. “Nadie hacía sonar el himno, nadie sacaba la bandera de España”, ha añadido.
Otro tema planteado por el partido verde y recordado por Ortega en su discurso ha sido la inmigración: Vox, primer partido español declaradamente antinmigración, aboga por la expulsión de todos los extranjeros indocumentados, la deportación de los que hayan delinquido y el endurecimiento de la obtención de la residencia y la nacionalidad del país.
Asimismo, el número dos en la lista de Vox en Madrid ha apuntado a la “ideología de género”. El partido de Abascal es explícitamente antifeminista y ha hecho bandera del resentimiento de parte de la población contra la Ley Integral de Violencia de Género de 2004, por discriminar a su juicio a los varones y fomentar la presentación de denuncias dentro de la familia.
¡Compatriotas, la resistencia ya está dentro del Congreso y no vamos a parar!”, ha dicho el secretario general del partido derechista Vox, Javier Ortega Smith, al inicio de su discurso postelectoral en Madrid (capital de España).
Un cuarto punto aludido ha sido el “expolio fiscal” que se da en España según Vox, que defiende una rebaja generalizada de impuestos “radical” en el caso del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), y que también afectaría al Impuesto de Sociedades y al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), además de suprimirse los impuestos de Patrimonio y de Sucesiones y Donaciones, así como las plusvalías municipales.
Ortega Smith ha anticipado que su estrategia en el Congreso de los Diputados consistirá en plantear proposiciones de ley que obligarán al Partido Popular (PP) y a Ciudadanos —la “derechita cobarde” y “la veleta naranja”, en la retórica ofensiva de Vox— a “retratarse”, de modo que quede patente “quién entra decididamente a cambiar las cosas”.
El partido Vox ha entrado por primera vez en el Congreso de los Diputados español con 24 escaños (de un total de 350), algo más de cinco años después de lanzarse —apoyándose en financiación canalizada por el grupo terrorista antiraní Muyahidín Jalq (MKO, por sus siglas en inglés)—.
mla/rha/fdd/alg
