El Canal 12 israelí informó el miércoles que la Administración del presidente estadounidense Donald Trump considera reubicar a los residentes de la Franja de Gaza en Marruecos, y los territorios autónomos de Puntlandia y Somalilandia.
Según el informe, los tres países comparten la fuerte necesidad de apoyo por parte de Estados Unidos, ya que Somalilandia y Puntlandia buscan el reconocimiento internacional, y Marruecos tiene una disputa territorial en curso sobre el Sáhara Occidental.
Asimismo, el medio israelí aseguró que el plan de Trump para desterrar a los palestinos de la Franja de Gaza no ha sido solo un comentario mediático, sino un plan que ya había sido preparado con antelación.
El martes tras un encuentro con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, el magnate republicano repitió su controvertido plan para la franja palestina, según el cual, EE.UU. “se hará cargo de Gaza” y que la población del enclave tendrá que abandonar permanentemente su patria.
“Es mi esperanza asentarlos en un lugar realmente bonito, de donde no querrán volver”, afirmó Trump, calificando su plan de limpieza étnica como una iniciativa de “paz”.
Anteriormente, el mandatario republicano pidió a Jordania y Egipto que recibieran a los gazatíes para limpiar Gaza, lo que fue rechazado categóricamente por ambos países árabes.
Jordania ha advertido que todo intento de obligar a palestinos a desplazarse forzosamente a su país equivale a una “declaración de guerra”. “Si se hace cualquier intento de reubicar por la fuerza a los palestinos en Jordania, lo combatiremos con todas nuestras fuerzas. Esta evacuación forzada equivale a declarar la guerra a Jordania, por lo que la combatiremos”, ha avisado el canciller jordano, Ayman al-Safadi.
Los planes de Trump para la Franja de Gaza han hecho sonar las alarmas de la comunidad internacional. Tanto aliados como rivales de Estados Unidos, ven en el plan un peligro para la frágil y dudosa tregua lograda en el enclave, tras más de 15 meses de guerra genocida israelí.
Rusia, China, Turquía, la Unión Europea (UE), Irán, Arabia Saudí, e Irak, entre otros países, se han opuesto categóricamente al plan de Trump, calificándolo de una limpieza étnica. Los críticos creen que el plan viola el derecho del pueblo palestino a tener un país soberano y enfatizan que Gaza pertenece a los palestinos.
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