La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) condenó el jueves en un comunicado el plan del presidente estadounidense, Donald Trump, para expulsar permanentemente a los palestinos de la Franja de Gaza y apoderarse del enclave costero palestino.
La ALBA-TCP consideró las declaraciones de Trump sobre Gaza de “absolutamente inaceptables e inhumanas, y violatorias del Derecho Internacional”. Denunció que el Gobierno estadounidense legitimise el proceso de limpieza étnica ejecutado por Israel contra el pueblo palestino en sus propias tierras históricas, tras más de 15 meses de guerra genocida en Gaza.
El comunicado puso de relieve que el controvertido plan de Trump “viola flagrantemente los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y los Derechos Humanos integralmente”.
Asimismo, dijo que el plan forma parte de una estrategia estadounidense de conseguir “botines económicos, como resultado de cada intervención militar, bajo la máxima de paz a través de la fuerza”.
La alianza regional hizo hincapié en que Gaza es “una parte integral del Estado de Palestina, junto a Cisjordania y Jerusalén Oriental [este de Al-Quds], y remarcó que solo los palestinos tienen pleno derecho a existir, a hacer vida y a desarrollar las potencialidades económicas en su territorio, bajo el principio elemental de autodeterminación de los pueblos y bajo el amparo de las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas.
La ALBA-TCP expresó su solidaridad con el pueblo palestino en su lucha de resistencia heroica contra el genocidio, la ocupación ilegal israelí y en su derecho inalienable a su existencia como Estado independiente ante las irresponsables pretensiones fascistas y expansionistas de Trump.
El plan de Trump para desplazar forzosamente a la población de Gaza ha desatacado una ola de condenas a nivel internacional. Incluso Latinoamérica se ha unido la voz de apoyo al pueblo palestino.
Perú, por su parte, reiteró el jueves su “apego a la defensa de los derechos humanos y al respeto del derecho internacional humanitario, y su consiguiente oposición a cualquier desplazamiento forzado de la población palestina de la Franja de Gaza”, y enfatizó que apoya una “paz duradera” en Asia Occidental.
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