• Un dron General Atomics Avenger, también conocido como Predator C, de Estados Unidos.
Publicada: viernes, 8 de marzo de 2019 23:41

Una “agencia gubernamental” de EE.UU., supuestamente la CIA, ha estado realizando misiones secretas con drones atómicos en Siria, según un nuevo informe.

“Sabemos a ciencia cierta que un puñado de (los drones) Avenger ha estado volando bajo un paraguas clasificado para una determinada agencia gubernamental y que se ha mantenido activo en el Oriente Medio, en particular en Siria”, reportó el portal The Drive, citando declaraciones del fabricante del referido avión no tripulado.

Conforme precisa el reporte, una agencia gubernamental estadounidense, se baraja ampliamente la posibilidad de que sea la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), probablemente en cooperación con la Fuerza Aérea norteamericana, ha llevado a cabo las citadas misiones en el marco de una variedad de “programas clasificados”.

Se trata del Q-11, una variante del dron General Atomics Avenger, también conocido como Predator C, construido por el centro de física nuclear General Atomics.

Q-11 es muy adecuado para realizar misiones discretas y flexibles en el espacio aéreo en Siria desde bases en países vecinos, sugiere la nota.

Esta misma semana, la revista neerlandesa Scramble Magazine publicó un informe que indica que aviones furtivos de ataque Lockheed F-117 Nighthawk de la Fuerza Aérea de EE.UU. habían sido utilizados durante ataques en el Oriente Medio en el 2017, aunque oficialmente ya fueron retirados de servicio.

Sabemos a ciencia cierta que un puñado de (los drones) Avenger ha estado volando bajo un paraguas clasificado para una determinada agencia gubernamental y que se ha mantenido activo en el Oriente Medio, en particular en Siria”, reportó el portal The Drive, citando declaraciones del fabricante del referido avión no tripulado.

No obstante, The Drive cuestiona el reporte de Scramble Magazine. “El fabricante del dron también reveló que al menos un Avenger había sobrevolado Siria al tiempo que surgían rumores de que los F-117 volvían al combate”.

Argumentando este punto, la nota apostilla que el Avenger “hubiera podido cumplir con muchos de los mismos requisitos (que el F-117) para una plataforma armada sigilosa capaz de atacar objetivos estáticos y móviles mucho más rápidos y, por lo tanto, más sensible que otros aviones no tripulados disponibles en la región”.

Estados Unidos intervino en el conflicto de Siria en septiembre de 2014, al frente de una autodenominada coalición internacional para presuntamente combatir al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) sin el consentimiento de Damasco. El Gobierno sirio ha denunciado en un sinfín de ocasiones que la presencia militar de Washington en el país árabe constituye una violación tanto de las leyes internacionales como de la soberanía de esta nación.

El controvertido uso de aviones no tripulados por parte de EE.UU. en operaciones antiterroristas comenzó durante el mandato del expresidente estadounidense George W. Bush tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 y fue ampliado a gran escala por Barack Obama para, de esta manera, limitar la presencia de efectivos estadounidenses en zonas en conflictos en el mundo.

El actual presidente de EE.UU., Donald Trump, expandió, a su vez, los ataques con drones en todo el Oriente Medio. Grupos pro derechos humanos denuncian que los civiles son las principales víctimas de las acometidas de los aviones no tripulados de Estados Unidos.

Pese a todo ello, Trump ordenó el miércoles cancelar el requisito que exigía que su Gobierno publicara informes anuales sobre la cifra de bajas civiles en ataques con drones, lo que le permitirá ocultar las bajas civiles dejadas por este tipo de los ataques estadounidenses.

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