“Ofreceremos una respuesta dura al más mínimo movimiento [agresivo] de los enemigos”, ha aseverado este martes el comandante de la División Aeroespacial del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI), el general de brigada Amir Ali Hayizade.
Tras haber resaltado la seguridad “ejemplar” del país persa, el titular militar iraní ha remarcado el poder disuasivo de la República Islámica, y ha declarado que las capacidades de los misiles y aviones no tripulados (drones) de Irán “son una espina en el costado de sus enemigos”.
Al respecto, Hayizade ha señalado que los mismos adversarios del país reconocen el estatus privilegiado del poder defensivo de Irán.
El comandante también ha subrayado la firmeza de la República Islámica para preservar su soberanía y seguridad nacionales ante cualquier plan enemigo.
Los comentarios de Hayizade se producen en una situación en que el régimen de Israel sigue tocando los tambores de la guerra con Irán.
Israel ha blandido la opción militar contra Irán y sus sitios nucleares, y se han realizado maniobras para hacer creer que se está preparando para ello, pese a que los expertos militares señalan que el régimen carece de capacidad para atacar a Irán.
Por otro lado, el régimen de Tel Aviv que prevé que un retorno de EE.UU. al acuerdo nuclear firmado en 2015—de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés)—, podría oscurecer sus lazos con el país norteamericano, también presiona a la Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, para que no vuelva al pacto, e intenta desalentar las negociaciones en curso en Viena (capital de Austria).
Cabe indicar que la séptima ronda de las conversaciones de Viena ha iniciado el lunes, y está enfocada en el levantamiento de las sanciones ilegales que EE.UU. ha impuesto contra el país persa tras su salida unilateral del convenio en 2018.
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