En el simulacro, bautizado Ela Beit al-Muqaddas-1 (“Hacia Al-Quds 1”), unos 50 drones RQ-170 y otros modelos como el Shahed-129 —similar al MQ-1 estadounidense— atacaron y destruyeron sus objetivos a una distancia de más de 1000 kilómetros.
Pese a las sanciones y presiones de EE.UU. y otros actores hostiles a Irán, el territorio persa ha sido escenario del vuelo de decenas de “drones militares modernos y avanzados de producción nacional”, ha dicho el subcomandante del CGRI, el general de brigada Hosein Salami, quien destacó que todos los aviones han sido fabricados por expertos iraníes.
“El pueblo y las Fuerzas Armadas de Irán no amenazan a ningún país ni desean ninguna guerra, pero están completamente listos para hacer frente a cualquier agresor o amenaza”, ha declarado por su parte el comandante del Cuartal Central de Jatam al-Anbia, el general de división Qolam Ali Rashid.
El pueblo y las Fuerzas Armadas de Irán no amenazan a ningún país ni desean ninguna guerra, pero están completamente listos para hacer frente a cualquier agresor o amenaza”, ha dicho el general de brigada Qolam Ali Rashid, comandante de la Base Central Jatam Al-Anbia.
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